pH, más que hamor, frensi.

Qué penica
lo questán haciendo con radio nacional no tiene nombre, se han cargado buena parte del tiempo de radio 5 que ahora comparte con radio 1 para que al mongolo del juan ramón lucas le oiga alguien y radio 3 hace ya tiempo que da berdadero asco.

Y a mi el programa de Trecet nunca me interesó pero no cabe duda de que era alguién que al menos sabía de lo que hablaba y que tenía algo que decir en una radio como radio 3. Lo que va viniendo por detrás: niñatos semianalfabetos que apenas saben hablar sin decir entre cada dos palabras un 'bueno' y que deben ser hijos, sobrinos o lo que sea de ministros porque si no es imposible explicar lo que han hecho en los últimos años.

No tenía ni idea.

Yo a Trecet últimamente sólo le escuchaba por las mañanas cuando colabora en Radio Marca, en el programa de Gozalo, pero cuando estaba estudiando hace cuatro años me lo ponía prácticamente todas las mañanas, y si en el 60% de las ocasiones se le iba la puta cabesa con la música que ponía, el porcentaje restante eran verdaderos hayazgos para mi.

Todo eso sin contar su manera divertida, cercana y alejada de toda petulancia (algo que debieran hacerse mirar el resto de sus compañeros de Radio 3 salvo honrosas excepciones) que tenía de hacer radio.

Una puta penica, y si, lo que llevan haciendo tanto en la radio como en Televisión española desde hace dos años es de echarse a llorar.

Encima si le ves el gepeto a la López parece congénita totar.

Da cosa, la cabrona.

Una vez salí disfrazado en carnaval de mujer iraní: cubierto de pies a cabeza de telas negras. No hice el ridículo solo, iba con cinco hamigos imaginarios.

No entraré en el psicoanálisis de parvulario que dice que el disfraz de carnaval es una representación de un anhelo del ego. Sí por los cojones quiero ser una mujer iraní.

El caso es que en lugar de una foto de Jomeini llevábamos una foto de Ramón Trecet, y en lugar de proclamas en pos de una república islámica llevábamos escritas frases antológicas de ayatolah 13t: Catacroc, dindón, tapón ahí, etc.

La exaltación de la hamistad alcanzaba máximos históricos cuando hamigos desconocidos reconocían a El Hombre en la foto y nos abrazaban entre lágrimas. Alguno me tocó el culo y le tuve que pegar una hostia a rodabrazo. Luego me pagó un bourbon. Más tarde me lié con su novia. Hoy es mi mejor hamigo.

Valga esta breve crónica como homenaje a Ramón.

Líderes mundiales en producción de Vergüenza ajena power. Som més que un forum!

Pasé bastantes tardes escuchando el programa de Trecet, y la mayoría del tiempo que sonaba la música me lo pasaba deseando que volviera a hablar, menos cuando ponía Madredeus que directamente me dormía.

Un saludo.

Montgomery escribió:Pasé bastantes tardes escuchando el programa de Trecet, y la mayoría del tiempo que sonaba la música me lo pasaba deseando que volviera a hablar

[suspiro]

...sí, era un gran DJ.