Las tardes se me hacen eternas tumbado en la cama mirando crecer y decrecer el tráfico de la Ronda, y ni se me ocurre nada mejor que hacer ni, de ocurrírseme, me sentiría dispuesto; ya no escribo ni dibujo ni canto en la ducha.
No encuentro placer alguno en la lectura de un libro, ni me atrae la musica ni tengo ánimo para salir. A menudo trato de hacerlo, y reír con mis amigos, pero ni las risas tienen contenido ni soy capaz de saborear la amistad.
Ya no paseo por la Rambla ni les devuelvo una pelota perdida a los críos ni hablo con las dependientas; ya no me interesa conocer gente nueva, ni lugares nuevos ni comidas nuevas ni placeres nuevos.
Ya no enciendo el móvil, ni cojo el teléfono ni acudo a la llamada del timbre ni consulto el correo.
Ya no hago la cama, ni plancho la ropa, ni barro el suelo ni uso desodorante ni me afeito.
Ya no me llenan un amanecer ni un atardecer, ni una cerveza de importación ni una buena rama de marihuana ni una buena frase.
Sólo me paso las horas tumbado en la cama, mirando crecer y decrecer el tráfico de la Ronda.
Y me escuece el alma y me escondo de mí mismo entre paredes de soledad que encierran un atronador silencio, tan pesado que ni puedo cargar con él ni puedo quitármelo de encima.
Y la vida se hace lastre y eternos los días e insufriblemente largas las noches, pero al mismo tiempo su suecesión resulta desesperadamente rápida.
Y vivo en un gemido constante, en un sollozo eterno, y un pensamiento exasperante retumba sin cesar dentro de mi cabeza y selectos recuerdos desgarran mi consciencia y es por eso que no duermo por las noches y es por eso que no estoy activo durante el día y es por todo ello que mi almohada está humeda.
Sólo paso el día tumbado en la cama mirando crecer y decrecer el tráfico de la Ronda.
Por su bien, por mi bien, no se vayan a tomar esto en serio. Para ese tipo de menesteres ya tenemos a Jugger.
Mal parto me raya
Don Jaimen escribió:Por su bien, por mi bien, no se vayan a tomar esto en serio. Para ese tipo de menesteres ya tenemos a Jugger.
Gracias por la aclaración, por un momento llegué a pensar que no era un texto fingido, y casi, en otro momento, echo a llorar.
Hasta la vista.
Capici?
"¡Tente, ladrón, malandrín, follón, que aquí te tengo y no te ha de valer tu cimitarra!"