Nicotin escribió:Norni, cuéntanos más. Intenta recordar alguna frase, cualquier cosa que saliese de su boca. Necesitamos una parábola, una metápHora, un proverbio.
La verdad es que poco queda ya que contar. Ramonet no era un hombre de muchas palabras, digamos que su vocabulario se limitaba a las canciones antes mencionadas más "Nnnno", "Sísisisi" "Ñam""Buenoooo" "Mío" y poquísimo más, créeme que eso le bastaba para hacerse entender en cualquier momento. Por ejemplo, la vez que intentamos que se viniera a dar una vuelta por fuera del recinto. Ahí estaba él con su pequeña mochilita cargada con una botella de agua, un bocata y calzoncillos de recambio (importante), con una camiseta limpia, pantalones cortos -¡inaudito!-, todo repeinao y más bonito que un San Luís.
Comienza el paseo: todos empezamos a caminar, salimos por la puerta, andamos un poco por la acera hasta el semáforo, esperamos que se ponga verde, cruzamos y ... ¡el jodido Ramonet se nos sienta en la acera y dice "Nnnnno"! Y a ver quien era la guapa que le alzaba a pulso. Yo desde luego no. Tras un diálogo que se puede resumir en - Va, Ramonet, levanta y anda un poco más. -Nnnno. - Venga Ramón, ¡si acabamos de salir! - Nnnnno. (repetir esto cuantas veces se desee hasta llenar 10 minutos de conversación) - Bueno, Ramonet ¿entonces volvemos contigo? -¡Sísísísí! -Pues entonces trae el bocadillo y el agua. -Nnnnno, ¡mmmío!