Más allá del cine
Publicado: 06 Jun 2006 15:41
Hola a todos.
En estos tiempos de anarquía foreril y anunciantes del apocalipsis contrabuyamos todos a intentar mejorar este, nuestro refugio asocial, mediante nuestros conocimientos cinéfilos o mandémoslo directamente todo al carajo, según como se quiera mirar.
Veréis, por simple curiosidad que tiene uno, me gustaría conocer (y espero que a vosotros también, por supuesto, el bien común por encima de todo) algunos casos en los que una película o una serie ha conseguido traspasar la pantalla y lograr que la sociedad imite acciones, expresiones o invente palabras vistas, dichas u oídas en ellas. Con lo de traspasar la pantalla no me refiero ni a "Poltergeist" ni a "The ring" ni similares, que quede claro.
Empecemos:
1940. Alfred Hitchcock, el único director de cine con emoticón propio: "{", estrena su película "Rebeca". Una gran película de intriga para muchos cinéfilos en la que una serie de personajes se ven de una manera u otra influídos por la muerte de Rebeca, la antigua esposa del protagonista. El argumento poco importó a las marujas americanas, quien únicamente tenían ojitos para la fascinante chaquetilla que llevaba la protagonista, Joan Fontaine.
-¡Queriiiida, me encanta tu chaqueta color rosa furcia!
-Ya está la hijaputa esta tocando las narices, mírala tú que graciosa
Entonces había que encontrar un término para nombrar a la chaquetilla. En aquel entonces se vio fácil:
-Vamos a ver ¿Cómo se llama la película?
-"Rebeca"
-¿Y entonces cómo vamos a llamar a la chaquetilla?
-Mmmmm.... ¿Rebeca?
-¡No, tricot si te parece, no te jode!
Y entonces todas las marujas americanas ( y por inercia las de todo el mundo) iban contentas por la calle luciendo la dichosa rebeca allá a dónde fueran hasta nuestros días.
Ejemplo 2:
1971. (1975 en España) Stanley Kubrick estrena (allí dónde pudo) "La naranja mecánica". Una de las películas más influyentes en la juventud de entonces.
Empezando por la tendencia que mostraban muchos jóvenes guiris a imitar a los drugos violando mozas y dando palizas a viejos, uno de los motivos de la prohibición del film en Reino Unido hasta la muerte del director.
Seguimos por ser la "película de modernillos" por excelencia, la más chupiguay sin discusión ninguna. Prueba de ello es que no se conoce ninguna ciudad española con un número respetable de habitantes en la que no haya un pub llamado "Moloko", bar dónde se reunían los protagonistas. Incluso un grupo musical ha adoptado el dichoso nombre.
Finalizamos por la selección holandesa de fútbol. En aquella década de Cruyff en la que la el país porreta brillaba por medio del juego en el campo, recibieron el mote de la famosa película. "La naranja mecánica"
-¡¡Vamos a hacer un poco de mete-saca, tontorrón!!
Bueno, de momento lo dejo así, colaborad un poco, anda.
Y hacedme el favor de ser felices.
En estos tiempos de anarquía foreril y anunciantes del apocalipsis contrabuyamos todos a intentar mejorar este, nuestro refugio asocial, mediante nuestros conocimientos cinéfilos o mandémoslo directamente todo al carajo, según como se quiera mirar.
Veréis, por simple curiosidad que tiene uno, me gustaría conocer (y espero que a vosotros también, por supuesto, el bien común por encima de todo) algunos casos en los que una película o una serie ha conseguido traspasar la pantalla y lograr que la sociedad imite acciones, expresiones o invente palabras vistas, dichas u oídas en ellas. Con lo de traspasar la pantalla no me refiero ni a "Poltergeist" ni a "The ring" ni similares, que quede claro.
Empecemos:
1940. Alfred Hitchcock, el único director de cine con emoticón propio: "{", estrena su película "Rebeca". Una gran película de intriga para muchos cinéfilos en la que una serie de personajes se ven de una manera u otra influídos por la muerte de Rebeca, la antigua esposa del protagonista. El argumento poco importó a las marujas americanas, quien únicamente tenían ojitos para la fascinante chaquetilla que llevaba la protagonista, Joan Fontaine.

-¡Queriiiida, me encanta tu chaqueta color rosa furcia!
-Ya está la hijaputa esta tocando las narices, mírala tú que graciosa
Entonces había que encontrar un término para nombrar a la chaquetilla. En aquel entonces se vio fácil:
-Vamos a ver ¿Cómo se llama la película?
-"Rebeca"
-¿Y entonces cómo vamos a llamar a la chaquetilla?
-Mmmmm.... ¿Rebeca?
-¡No, tricot si te parece, no te jode!
Y entonces todas las marujas americanas ( y por inercia las de todo el mundo) iban contentas por la calle luciendo la dichosa rebeca allá a dónde fueran hasta nuestros días.
Ejemplo 2:
1971. (1975 en España) Stanley Kubrick estrena (allí dónde pudo) "La naranja mecánica". Una de las películas más influyentes en la juventud de entonces.
Empezando por la tendencia que mostraban muchos jóvenes guiris a imitar a los drugos violando mozas y dando palizas a viejos, uno de los motivos de la prohibición del film en Reino Unido hasta la muerte del director.
Seguimos por ser la "película de modernillos" por excelencia, la más chupiguay sin discusión ninguna. Prueba de ello es que no se conoce ninguna ciudad española con un número respetable de habitantes en la que no haya un pub llamado "Moloko", bar dónde se reunían los protagonistas. Incluso un grupo musical ha adoptado el dichoso nombre.
Finalizamos por la selección holandesa de fútbol. En aquella década de Cruyff en la que la el país porreta brillaba por medio del juego en el campo, recibieron el mote de la famosa película. "La naranja mecánica"

-¡¡Vamos a hacer un poco de mete-saca, tontorrón!!
Bueno, de momento lo dejo así, colaborad un poco, anda.
Y hacedme el favor de ser felices.