Sant Narcís y las moscas

[Carmelo]

Cuenta la leyenda que en el s.XIII d.C. la ciudad de Girona fue atacada por huestes francesas bajo el mando del pérfido Felip l’Ardit.

Cuando estas tropas profanaron la iglesia de Sant Feliu, lugar donde Sant Narcís, patrono de la ciudad, está enterrado, del cuerpo del santo empezaron a salir montones de moscas a cada cual más grande y gorda, de todos los colores, que atacaron tanto a los franceses como a sus monturas.

Muchos murieron a causa de los ataques de las moscas y los que no, tuvieron que salir pitando de la ciudad. Bernat Desclot, cronista oficial allá por junio de 1285, escribe que las moscas entraron por las fosas nasales y por el ano de los caballos, haciendo doblar de dolor a las pobres bestias. En aquel suceso fallecieron unos cuatro mil caballos y veinte mil soldados, que fueron picados mayormente en la cara.

De esta manera, el patrono de la ciudad ayudó a los habitantes de Girona a combatir contra los franceses.

Las moscas de Sant Narcís no sólo ayudaron a los habitantes de Girona en el s.XIII.
En el año 1653, Girona fue otra vez atacada por los gabachos. Es otro Bernat (ha de ser nombre de cronista) ahora, Bernat Boadas, quien habla de que en esta ocasión los gerundenses, por si acaso, colocaron el cuerpo del santo en la muralla. Un nuevo enjambre de moscas “más grandes que una bellota y venenosas” brotó por la nariz del santo y atacó salvajemente a los caballos “asustándolos y haciéndolos morir en medio de terribles males”, según juraron ante el notario real de Sant Feliu de Guíxols dos oficiales franceses.

Bueno. Si os pasáis por Girona, mucho cuidao con las moscas.

[NORNA]

Carmelinho, combinando 3 de tus preferencias: Joyce, bichejos y anécdotas curiosas, parece que el próximo post será sobre San Patricio.

[curreta]

Un 10 para carmelo, gracias por el relato. Pásate por aqui más a menudo a contarnos mas cosas, que eres un crack.