Re: El unboxing del culo blanco de Franco
Publicado: 24 Oct 2019 15:51
Temazo.
Soy una fan histérica de mierda, no me he atrevido a acercarme finalmente, he preguntado a Coque (el de sonido o el otro) en un momento en el que iba al coche a por algo, si podía ir a hacerme la puta foto con los Hídolos, y me ha dicho que no, que tenía que esperar porque estaban grabando.
A la pregunta "¿Cuánto tiempo más vais a estar grabando, (cojones)?" aterida de frío, la respuesta ha sido "Hasta que se vaya el helicóptero" y ha sido entonces cuando he sido consciente de que si en este país algo empieza a las diez y media y se calcula que en hora y media ya estaría, en realidad no va a estar antes de las dos.
Así que con todo el dolor de mi corazón y el regocijo de mis congelados pieses, me he ido dejando allí a esos cinco sujetos hipotecados hasta que se les cayesen los dedos de frío.
He llegado a casa a reiniciar mi circulación sanguínea y he salido al jardín a ver pasar el helicóptero. No lo he visto tampoco, joder, demasiados árboles, pero LO HE OÍDO y sonaba a victoria.
Pero el cuadro ha sido hermoso. El páramo del nunca tan seco como hoy embalse de la Jarosa, yo sentada en una piedra mirando de lejos al patán de Ignatius haciendo el cafre por el barro, la cruz gigantesca vigilando y la nada a nuestro alrededor.
Mi única ocasión de haber ofrecido 10 pavos a Ignatius por un rato de conversación, o de haber violeado al Broncano se ha ido por el desagüe.
Soy un fraude.
Soy una fan histérica de mierda, no me he atrevido a acercarme finalmente, he preguntado a Coque (el de sonido o el otro) en un momento en el que iba al coche a por algo, si podía ir a hacerme la puta foto con los Hídolos, y me ha dicho que no, que tenía que esperar porque estaban grabando.
A la pregunta "¿Cuánto tiempo más vais a estar grabando, (cojones)?" aterida de frío, la respuesta ha sido "Hasta que se vaya el helicóptero" y ha sido entonces cuando he sido consciente de que si en este país algo empieza a las diez y media y se calcula que en hora y media ya estaría, en realidad no va a estar antes de las dos.
Así que con todo el dolor de mi corazón y el regocijo de mis congelados pieses, me he ido dejando allí a esos cinco sujetos hipotecados hasta que se les cayesen los dedos de frío.
He llegado a casa a reiniciar mi circulación sanguínea y he salido al jardín a ver pasar el helicóptero. No lo he visto tampoco, joder, demasiados árboles, pero LO HE OÍDO y sonaba a victoria.
Pero el cuadro ha sido hermoso. El páramo del nunca tan seco como hoy embalse de la Jarosa, yo sentada en una piedra mirando de lejos al patán de Ignatius haciendo el cafre por el barro, la cruz gigantesca vigilando y la nada a nuestro alrededor.
Mi única ocasión de haber ofrecido 10 pavos a Ignatius por un rato de conversación, o de haber violeado al Broncano se ha ido por el desagüe.
Soy un fraude.