La segunda transición -The economist-
La segunda transición -The economist-
Otro articulo traducido por Alatriste:
Directo del número especial de 'The Economist' dedicado a España - que lamentablemente no compré, me enteré demasiado tarde...
En una sola entrega, además....
La Segunda Transición, de John Grimmond
Después de 30 años de éxito político y económico España está entrando en una nueva fase de desarrollo democrático, dice John Grimmond
Es difícil que a uno no le guste España, es difícil no disfrutar la atmósfera de una sociedad tan amable [Nota del Traductor: el término original es 'civilised', que además de civilizado puede significar también amable, tranquilo, relajado, o cortés... incluso alegre podría encajar dado el contexto] y no admirar los logros de su pueblo. En menos de 30 años - el Generalísimo Francisco Franco murió el 20 de Noviembre de 1975 - España ha salido de la dictadura y el aislamiento internacional, ha construido una economía de éxito y ha fundado una democracia efectiva. Posiblemente ningún otro país europeo ha conseguido tanto, en tantos frentes, y tan rapidamente.
Pero España se siente también ligeramente incómoda, le falta cierta confianza en sí misma. Esto era cierto incluso antes de las bombas terroristas del 11 de Marzo, que sacudieron a los españoles hasta lo más hondo y arrojaron al Partido Popular de José María Aznar del gobierno, que creía tener asegurado para otros cuatro años. Las cosas no estaban tan claras ni siquiera entonces, y ciertamente son más complicadas ahora.
Gran parte de lo que España ha conseguido es sólido y real. En menos de una generación el país ha establecido un sistema democrático en el que los partidos se alternan en el gobierno y los gobiernos, en general, cumplen. Por supuesto, la evolución ha tenido sus baches: un intento de golpe militar en 1981, por ejemplo, valientemente abortado por el rey Juan Carlos, y un escándalo durante el gobierno socialista de Felipe González concerniente al uso de asesinos contra terroristas vascos. En ambos casos lo que estaba realmente en juego era el imperio de la ley.
A pesar de todo en general España no solo ha desarrollado una democracia fuerte, sino un sistema de gobiernos que preparan políticas y las llevan a cabo. En otras palabras, que gobiernan. Y sobre todo que producen crecimento económico, que es por lo que los españoles de hoy son un 75% más ricos que los de hace 30 años y han visto su economía crecer más que la media europea durante casi diez años sin interrupción [Nota del Traductor: la verdad es que no es moco de pavo, casi 40 trimestres seguidos creciendo por encima de la media, desde una fecha allá por 1984 o principios de 1985, aunque resulta algo injusto que el autor no mencione el efecto de las ayudas europeas en este crecimiento; es posible que los demás artículos tratasen ese tema]
No es sorprendente que la España democrática se haya ganado el respeto de los demás países. Algunos han atribuido este hecho al liderazgo de mano firme de J.M. Aznar, que aflojó los lazos de España con Francia y Alemania y los fortaleció con la euroequívoca Gran Bretaña y los firmes Estados Unidos [Nota del Traductor: el término original es 'uncompromising' - que no acepta medias tintas o quedarse a medio camino...] y no toleraba tonterías de países como Marruecos cuando le provocaban. Después de muchos años en las fronteras de la respetabilidad internacional, España ciertamente había empezado a contar en el mundo. Aznar supo ver la importancia de este hecho, pero el respeto recibido por su país más allá de sus fronteras no derivaba tanto de su papel personal en el escenario mundial como del hecho de que España se había convertido en un país que funcionaba. En un país con el que había que contar.
[Nota del Traductor: dos comentarios; uno es que el papel internacional de Felipe González fue ya bastante importante aunque se limitó casi por completo al escenario europeo, salvo la excepción de la Conferencia sobre Oriente Medio en Madrid; el otro es que resulta curioso que mencione que España se ha convertido en estos 30 años en un país 'que funciona'. Esa fue una de las frases más conocidas de Felipe González: que el 'cambio' consistía en que España funcionase; es curioso que el autor no lo mencione si lo sabe, y es igual de curioso que use este giro si no lo ha oído nunca... probablemente si que conoce la frase, por una circunstancia que veremos más adelante]
El contraste con Italia es instructivo. Italia ha sido una democracia durante aproximadamente el doble de tiempo que España. Es más rica, y su población de 59 millones de habitantes es una vez y media la de España, que tiene 40. Incluso, bajo el gobierno de Silvio Berlusconi, Italia como España se ha alineado con la América de George Bush y ha enviado tropas a Irak a petición suya. Pero ¿Qué influencia posee Italia? Berlusconi dificilmente podría igualar los 14 encuentros de Aznar con Bush entre 2002 y 2004. Ni siquiera fue invitado a unirse a Aznar, Blair y José Manuel Durão Barroso de Portugal durante la cumbre de George Bush en las Azores antes de la guerra de Irak, en marzo de 2003. Pero si Italia ha estado boxeando por debajo de su peso, y España por encima, no es porque Bush encontrase al primer ministro español más cercano ideologicamente que el italiano. Es porque España es un país serio.
[Nota del Traductor: esta es la circunstancia que mencionaba más arriba; es aún más difícil creer que el autor no conoce la frase de Aznar de que España no debía ser un país simpático, sino un país serio, que contase (no recuerdo las palabras exactas); el tal John Grimmond les está saqueando las frases a nuestros primeros ministros...]
Pero no demasiado serio, por fortuna. Para aquellos que buscan bares de tapas [N. del T. en español en el original] a la moda, vida nocturna sin descanso o restaurantes innovadores España es el sitio donde hay que ir. El buen vino español ya no sale sólo de La Rioja, no más que el buen queso solamente de La Mancha. Los atletas españoles destacan en los campos de golf, de fútbol y de tenis. Cantantes españoles han llenado a reventar desde hace mucho tiempo los Teatros de la Opera del mundo. Ahora sus bailarines, como Tamar Rojo, que actúa en el Royal Ballet británico, cautivan a las audiencias, sus actrices, como Elena Anaya, están conquistando Hollywood, y sus directores, como Pedro Almodóvar, se están comiendo Cannes.
La exuberancia cultural es aún más notable en la arquitectura, encargada por españoles aunque no toda diseñada por españoles. La Torre Agbar, un gran rascacielos nuevo que ha cambiado recientemente la línea del cielo de Barcelona, es solo uno de los muchos edificios sorprendentes que están creciendo en España en una explosión de fecundidad arquitectónica. Esta tendencia fue inaugurada por los ciudadanos de la vieja ciudad industrial de Bilbao, que en los años 90 tuvieron la perspicacia necesaria para encargar a un arquitecto americano de primera fila, Frank Gehry, que diseñase su nuevo Museo Guggenheim (un espectacular buque recubierto de titanio que ocupa el lugar de un antiguo astillero) y para persuadir al gobierno vasco de que lo pagara. Después pidieron al español Santiago Calatrava que diseñase su elegante aeropierto de Sondika. Luego consiguieron que el británico Norman Foster se ocupase de su metro - cuyas estaciones son ahora conocidas como 'fosteritos'. Bilbao, antaño herrumbrosa y maloliente, nunca ha lamentado estos cambios.
Otras ciudades siguen la misma línea. Barcelona ha contratado a Zaha Hadid, la anglo-iraqui ganadora del Premio Pritzker del 2004, para que diseñe una Plaza de las Artes (también está supervisando el desarrollo de otra zona de Bilbao y diseñando un gran edificio para Durango). Córdoba ha pedido al holandés Rem Koolhas que planee su propio proyecto urbano. Valencia ha contratado a Calatrava para que cree una Ciudad de las Artes y las Ciencias. Y Madrid, no contenta con contratar al británico Richard Rodgers para que colabore en la terminación del ampliado aeropuerto de Barajas, ha emprendido cinco proyectos con un coste por encima de 150 millones de euros que formarán juntos una nueva zona cultural llamada el Salón del Prado.
El factor Fiesta
Las ciudades de España han estado durante más de diez años promocionándose inteligentemente, y con ellas al conjunto del país, mediante fiestas [Nota del Traductor: en español en el orginal] internacionales. Barcelona sacó un enorme provecho de las Olimpiadas de 1992, igual que Sevilla de su Exposición del mismo año. Actualmente Barcelona está albergando un 'jamboree' (N. del T.¿? suena hindú... pero en cualquier caso el sentido está claro, un gran fiestorro) de 326 millones de euros llamado Forum 2004. En el 2007 Valencia albergará, en nombre de los campeones suizos, encerrados en el interior, la más antigua competición de vela del mundo, la Copa América. Y Madrid está en estos momentos segunda en las apuestas para albergar las Olimpiadas del año 2012.
Todo esto hace que España produzca una sensación de ritmo vibrante. Indudablemente ayuda a atraer visitantes y hace que los españoles sientan que viven en una sociedad moderna y culturalmente viva. Pero también ayuda a poner en evidencia aquellas partes de la existencia española que no han evolucionado con los tiempos.
La evidencia de este retraso puede advertirse en la mayor parte de las áreas de la vida española. Los negocios españoles, por ejemplo, son notablemente timoratos, deferentes con el gobierno, y, con algunas excepciones como la cadena de tiendas de confección Zara y el fabricante de acero inoxidable Acerinox, reluctantes a expandirse más allá de los países de habla hispana, incluso en Europa [Nota del Traductor: probablemente un reflejo de la pésima preparación de los ejecutivos españoles, que brilla con luz propia en el área del dominio de idiomas extranjeros, que, y hablo con conocimiento de causa, no se sabe si produce más desolación que verguenza, o a la inversa...] España posee pocas grandes compañias multinacionales. Las principales son antiguos gigantes estatales que han sido privatizados - y cuyos consejos de administración han sido llenados por el gobierno. Incluso compañías que no tienen relación formal con el gobierno frecuentemente buscan aprobación política para la composición de sus consejos. El reciente cambio de gobierno ha provocado muchos cambios en la España empresarial.
Estas turbulencias no están limitadas a los negocios. Toda clase de instituciones que en otros países podrían ser independientes - los think-tanks, la judicatura, el Instituto Cervantes, Radiotelevisión Española (de propiedad estatal) - han visto rodar cabezas después de las elecciones generales del 14 de marzo, igual que habían rodado tras elecciones anteriores. Esta práctica refleja la relativa juventud de la democracia española: no ha tenido tiempo para desarrollar la tupida red subterránea de organizaciones independientes que enriquece a democracias más antiguas - periódicos sin afiliación ideológica, asociaciones profesionales activas, universidades independientes, seguras de sí mismas, organismos no gubernamentales escépticos, celebridades con papel público, etc, etc.
España también está por detrás en ciertas áreas sociales como los derechos de los homosexuales y el papel de las mujeres [N. del T. hace poco leí un par de artículos americanos que sostenían lo contrario en lo referente a los homosexuales; me inclino a estar de acuerdo con los americanos si se refiere a las leyes o al papel de las administraciones públicas incluyendo las dirigidas por el PP, pero de acuerdo con este otro en cuanto a la sociedad en general]. La violencia doméstica es un problema grave - no más que en otros lugares, pero quizá hasta hace poco no haya recibido la atención merecida. La iglesia católica todavía recibe gran parte de sus ingresos de una porción de los impuestos sobre la renta de los españoles, aunque sólo de forma voluntaria e individual. En estos y otros asuntos se trabajará en el futuro, y el nuevo gobierno ya está tomando medidas relativas a muchos de ellos.
Otros dos problemas - la inmigración y el regionalismo [Nota del Traductor: nosotros hubiéramos dicho 'nacionalismos'] - son de naturaleza diferente: no están conectados directamente con los dolores de crecimiento de una democracia adolescente, pero puede que sean mucho más difíciles de tratar. Un país de emigrantes se ha convertido con considerable rapidez en uno de inmigrantes, y una parte de ellos puede que resulte difícil de absorber. Y un país que se ha descentralizado más que ningún otro en Europa no puede entender porque mucho de sus ciudadanos aún no están satisfechos, mientras que otros piensan que ya se ha ido demasiado lejos. Una gran parte de los españoles, al parecer, desea vivir en un estado plural de varias nacionalidades, mientras que otra gran parte ve su país como un estado unitario infestado por fastidiosos regionalistas románticos.
Todo esto se suma para acabar produciendo un país menos confiado y menos seguro de sí mismo de lo que parece. Hace cuatro meses España parecía dispuesta a aceptar el gobierno de mano dura de Aznar, su política exterior atlantista, su enfoque tradicional de los problemas sociales y su actitud inmovilista hacia los nacionalistas vascos, catalanes y demás. Un instante después el mismo país parece disfrutar con el rechazo a los americanos del nuevo gobierno, su apoyo por las causas de izquierdas y su nuevo espíritu de conciliación con las regiones ¿Cómo sería posible que un país capaz de un cambio tan rápido no se sintiera un tanto confuso?
Amores inconstantes
En realidad España nunca se sintió tan confiada como parecía, ni estaba tan enamorada de J.M. Aznar como los extranjeros pensaban - incluso si una parte de aquellos que ahora dicen detestar a este antiguo inspector de hacienda con pretensiones de gran potencia estaban dispuestos a votar por él hace unos cuantos meses. Es probable, sin embargo, que las dramáticas eleccciones de este año acaben siendo consideradas no como un subproducto de un ataque terrorista que acabó llevando a un cambio de gobierno, sino como el final natural de la primera era de la transición a la democracia de la España post-franquista. Lo que viene ahora es una segunda era - la trransición de una democracia sencilla a una más complicada, más sofisticada.
El nuevo gobierno dirigido por José Luis Rodríguez Zapatero ciertamente tiene la oportunidad de lanzar esta segunda transición. No ha perdido tiempo en traer de vuelta a las tropas de Irak, tender una mano abierta a los socios tradicionales de España en Europa y embarcarse en un programa de cambios sociales, prometiendo mantener al mismo tiempo mantener la vieja seguridad de una contabilidad equilibrada, y ofreciendo diálogo y consenso generales.
Popular como es en la actualidad, puede que esta no sea la forma más adecuada de enfrentarse a la nueva situación de España: un país más rico cuyos ciudadanos deberán encontrar en el futuro empleos de mayores ganancias y más productivos que las labores no cualificadas del pasado; una sociedad más diversa que ahora incluye multitudes de norteafricanos y latinoamericanos [Nota del Traductor: y europeos del este, sobre todo polacos y rumanos, y no pocos negros también; ambas cosas suelen sorprender a los anglosajones]; y una sociedad sometida a tensiones internas que tiene que gestionar las diferentes ambiciones de sus pueblos constituyentes - vascos, catalanes, gallegos y el resto - en el interior de una democracia tolerante y sofisticada. Zapatero tiene su oportunidad para comenzar a moldear una nueva España ¿Cuáles son sus perspectivas de éxito?
[este final estaba obviamente destinado a introducir el resto de los artículos del número monográfico]
Directo del número especial de 'The Economist' dedicado a España - que lamentablemente no compré, me enteré demasiado tarde...
En una sola entrega, además....
La Segunda Transición, de John Grimmond
Después de 30 años de éxito político y económico España está entrando en una nueva fase de desarrollo democrático, dice John Grimmond
Es difícil que a uno no le guste España, es difícil no disfrutar la atmósfera de una sociedad tan amable [Nota del Traductor: el término original es 'civilised', que además de civilizado puede significar también amable, tranquilo, relajado, o cortés... incluso alegre podría encajar dado el contexto] y no admirar los logros de su pueblo. En menos de 30 años - el Generalísimo Francisco Franco murió el 20 de Noviembre de 1975 - España ha salido de la dictadura y el aislamiento internacional, ha construido una economía de éxito y ha fundado una democracia efectiva. Posiblemente ningún otro país europeo ha conseguido tanto, en tantos frentes, y tan rapidamente.
Pero España se siente también ligeramente incómoda, le falta cierta confianza en sí misma. Esto era cierto incluso antes de las bombas terroristas del 11 de Marzo, que sacudieron a los españoles hasta lo más hondo y arrojaron al Partido Popular de José María Aznar del gobierno, que creía tener asegurado para otros cuatro años. Las cosas no estaban tan claras ni siquiera entonces, y ciertamente son más complicadas ahora.
Gran parte de lo que España ha conseguido es sólido y real. En menos de una generación el país ha establecido un sistema democrático en el que los partidos se alternan en el gobierno y los gobiernos, en general, cumplen. Por supuesto, la evolución ha tenido sus baches: un intento de golpe militar en 1981, por ejemplo, valientemente abortado por el rey Juan Carlos, y un escándalo durante el gobierno socialista de Felipe González concerniente al uso de asesinos contra terroristas vascos. En ambos casos lo que estaba realmente en juego era el imperio de la ley.
A pesar de todo en general España no solo ha desarrollado una democracia fuerte, sino un sistema de gobiernos que preparan políticas y las llevan a cabo. En otras palabras, que gobiernan. Y sobre todo que producen crecimento económico, que es por lo que los españoles de hoy son un 75% más ricos que los de hace 30 años y han visto su economía crecer más que la media europea durante casi diez años sin interrupción [Nota del Traductor: la verdad es que no es moco de pavo, casi 40 trimestres seguidos creciendo por encima de la media, desde una fecha allá por 1984 o principios de 1985, aunque resulta algo injusto que el autor no mencione el efecto de las ayudas europeas en este crecimiento; es posible que los demás artículos tratasen ese tema]
No es sorprendente que la España democrática se haya ganado el respeto de los demás países. Algunos han atribuido este hecho al liderazgo de mano firme de J.M. Aznar, que aflojó los lazos de España con Francia y Alemania y los fortaleció con la euroequívoca Gran Bretaña y los firmes Estados Unidos [Nota del Traductor: el término original es 'uncompromising' - que no acepta medias tintas o quedarse a medio camino...] y no toleraba tonterías de países como Marruecos cuando le provocaban. Después de muchos años en las fronteras de la respetabilidad internacional, España ciertamente había empezado a contar en el mundo. Aznar supo ver la importancia de este hecho, pero el respeto recibido por su país más allá de sus fronteras no derivaba tanto de su papel personal en el escenario mundial como del hecho de que España se había convertido en un país que funcionaba. En un país con el que había que contar.
[Nota del Traductor: dos comentarios; uno es que el papel internacional de Felipe González fue ya bastante importante aunque se limitó casi por completo al escenario europeo, salvo la excepción de la Conferencia sobre Oriente Medio en Madrid; el otro es que resulta curioso que mencione que España se ha convertido en estos 30 años en un país 'que funciona'. Esa fue una de las frases más conocidas de Felipe González: que el 'cambio' consistía en que España funcionase; es curioso que el autor no lo mencione si lo sabe, y es igual de curioso que use este giro si no lo ha oído nunca... probablemente si que conoce la frase, por una circunstancia que veremos más adelante]
El contraste con Italia es instructivo. Italia ha sido una democracia durante aproximadamente el doble de tiempo que España. Es más rica, y su población de 59 millones de habitantes es una vez y media la de España, que tiene 40. Incluso, bajo el gobierno de Silvio Berlusconi, Italia como España se ha alineado con la América de George Bush y ha enviado tropas a Irak a petición suya. Pero ¿Qué influencia posee Italia? Berlusconi dificilmente podría igualar los 14 encuentros de Aznar con Bush entre 2002 y 2004. Ni siquiera fue invitado a unirse a Aznar, Blair y José Manuel Durão Barroso de Portugal durante la cumbre de George Bush en las Azores antes de la guerra de Irak, en marzo de 2003. Pero si Italia ha estado boxeando por debajo de su peso, y España por encima, no es porque Bush encontrase al primer ministro español más cercano ideologicamente que el italiano. Es porque España es un país serio.
[Nota del Traductor: esta es la circunstancia que mencionaba más arriba; es aún más difícil creer que el autor no conoce la frase de Aznar de que España no debía ser un país simpático, sino un país serio, que contase (no recuerdo las palabras exactas); el tal John Grimmond les está saqueando las frases a nuestros primeros ministros...]
Pero no demasiado serio, por fortuna. Para aquellos que buscan bares de tapas [N. del T. en español en el original] a la moda, vida nocturna sin descanso o restaurantes innovadores España es el sitio donde hay que ir. El buen vino español ya no sale sólo de La Rioja, no más que el buen queso solamente de La Mancha. Los atletas españoles destacan en los campos de golf, de fútbol y de tenis. Cantantes españoles han llenado a reventar desde hace mucho tiempo los Teatros de la Opera del mundo. Ahora sus bailarines, como Tamar Rojo, que actúa en el Royal Ballet británico, cautivan a las audiencias, sus actrices, como Elena Anaya, están conquistando Hollywood, y sus directores, como Pedro Almodóvar, se están comiendo Cannes.
La exuberancia cultural es aún más notable en la arquitectura, encargada por españoles aunque no toda diseñada por españoles. La Torre Agbar, un gran rascacielos nuevo que ha cambiado recientemente la línea del cielo de Barcelona, es solo uno de los muchos edificios sorprendentes que están creciendo en España en una explosión de fecundidad arquitectónica. Esta tendencia fue inaugurada por los ciudadanos de la vieja ciudad industrial de Bilbao, que en los años 90 tuvieron la perspicacia necesaria para encargar a un arquitecto americano de primera fila, Frank Gehry, que diseñase su nuevo Museo Guggenheim (un espectacular buque recubierto de titanio que ocupa el lugar de un antiguo astillero) y para persuadir al gobierno vasco de que lo pagara. Después pidieron al español Santiago Calatrava que diseñase su elegante aeropierto de Sondika. Luego consiguieron que el británico Norman Foster se ocupase de su metro - cuyas estaciones son ahora conocidas como 'fosteritos'. Bilbao, antaño herrumbrosa y maloliente, nunca ha lamentado estos cambios.
Otras ciudades siguen la misma línea. Barcelona ha contratado a Zaha Hadid, la anglo-iraqui ganadora del Premio Pritzker del 2004, para que diseñe una Plaza de las Artes (también está supervisando el desarrollo de otra zona de Bilbao y diseñando un gran edificio para Durango). Córdoba ha pedido al holandés Rem Koolhas que planee su propio proyecto urbano. Valencia ha contratado a Calatrava para que cree una Ciudad de las Artes y las Ciencias. Y Madrid, no contenta con contratar al británico Richard Rodgers para que colabore en la terminación del ampliado aeropuerto de Barajas, ha emprendido cinco proyectos con un coste por encima de 150 millones de euros que formarán juntos una nueva zona cultural llamada el Salón del Prado.
El factor Fiesta
Las ciudades de España han estado durante más de diez años promocionándose inteligentemente, y con ellas al conjunto del país, mediante fiestas [Nota del Traductor: en español en el orginal] internacionales. Barcelona sacó un enorme provecho de las Olimpiadas de 1992, igual que Sevilla de su Exposición del mismo año. Actualmente Barcelona está albergando un 'jamboree' (N. del T.¿? suena hindú... pero en cualquier caso el sentido está claro, un gran fiestorro) de 326 millones de euros llamado Forum 2004. En el 2007 Valencia albergará, en nombre de los campeones suizos, encerrados en el interior, la más antigua competición de vela del mundo, la Copa América. Y Madrid está en estos momentos segunda en las apuestas para albergar las Olimpiadas del año 2012.
Todo esto hace que España produzca una sensación de ritmo vibrante. Indudablemente ayuda a atraer visitantes y hace que los españoles sientan que viven en una sociedad moderna y culturalmente viva. Pero también ayuda a poner en evidencia aquellas partes de la existencia española que no han evolucionado con los tiempos.
La evidencia de este retraso puede advertirse en la mayor parte de las áreas de la vida española. Los negocios españoles, por ejemplo, son notablemente timoratos, deferentes con el gobierno, y, con algunas excepciones como la cadena de tiendas de confección Zara y el fabricante de acero inoxidable Acerinox, reluctantes a expandirse más allá de los países de habla hispana, incluso en Europa [Nota del Traductor: probablemente un reflejo de la pésima preparación de los ejecutivos españoles, que brilla con luz propia en el área del dominio de idiomas extranjeros, que, y hablo con conocimiento de causa, no se sabe si produce más desolación que verguenza, o a la inversa...] España posee pocas grandes compañias multinacionales. Las principales son antiguos gigantes estatales que han sido privatizados - y cuyos consejos de administración han sido llenados por el gobierno. Incluso compañías que no tienen relación formal con el gobierno frecuentemente buscan aprobación política para la composición de sus consejos. El reciente cambio de gobierno ha provocado muchos cambios en la España empresarial.
Estas turbulencias no están limitadas a los negocios. Toda clase de instituciones que en otros países podrían ser independientes - los think-tanks, la judicatura, el Instituto Cervantes, Radiotelevisión Española (de propiedad estatal) - han visto rodar cabezas después de las elecciones generales del 14 de marzo, igual que habían rodado tras elecciones anteriores. Esta práctica refleja la relativa juventud de la democracia española: no ha tenido tiempo para desarrollar la tupida red subterránea de organizaciones independientes que enriquece a democracias más antiguas - periódicos sin afiliación ideológica, asociaciones profesionales activas, universidades independientes, seguras de sí mismas, organismos no gubernamentales escépticos, celebridades con papel público, etc, etc.
España también está por detrás en ciertas áreas sociales como los derechos de los homosexuales y el papel de las mujeres [N. del T. hace poco leí un par de artículos americanos que sostenían lo contrario en lo referente a los homosexuales; me inclino a estar de acuerdo con los americanos si se refiere a las leyes o al papel de las administraciones públicas incluyendo las dirigidas por el PP, pero de acuerdo con este otro en cuanto a la sociedad en general]. La violencia doméstica es un problema grave - no más que en otros lugares, pero quizá hasta hace poco no haya recibido la atención merecida. La iglesia católica todavía recibe gran parte de sus ingresos de una porción de los impuestos sobre la renta de los españoles, aunque sólo de forma voluntaria e individual. En estos y otros asuntos se trabajará en el futuro, y el nuevo gobierno ya está tomando medidas relativas a muchos de ellos.
Otros dos problemas - la inmigración y el regionalismo [Nota del Traductor: nosotros hubiéramos dicho 'nacionalismos'] - son de naturaleza diferente: no están conectados directamente con los dolores de crecimiento de una democracia adolescente, pero puede que sean mucho más difíciles de tratar. Un país de emigrantes se ha convertido con considerable rapidez en uno de inmigrantes, y una parte de ellos puede que resulte difícil de absorber. Y un país que se ha descentralizado más que ningún otro en Europa no puede entender porque mucho de sus ciudadanos aún no están satisfechos, mientras que otros piensan que ya se ha ido demasiado lejos. Una gran parte de los españoles, al parecer, desea vivir en un estado plural de varias nacionalidades, mientras que otra gran parte ve su país como un estado unitario infestado por fastidiosos regionalistas románticos.
Todo esto se suma para acabar produciendo un país menos confiado y menos seguro de sí mismo de lo que parece. Hace cuatro meses España parecía dispuesta a aceptar el gobierno de mano dura de Aznar, su política exterior atlantista, su enfoque tradicional de los problemas sociales y su actitud inmovilista hacia los nacionalistas vascos, catalanes y demás. Un instante después el mismo país parece disfrutar con el rechazo a los americanos del nuevo gobierno, su apoyo por las causas de izquierdas y su nuevo espíritu de conciliación con las regiones ¿Cómo sería posible que un país capaz de un cambio tan rápido no se sintiera un tanto confuso?
Amores inconstantes
En realidad España nunca se sintió tan confiada como parecía, ni estaba tan enamorada de J.M. Aznar como los extranjeros pensaban - incluso si una parte de aquellos que ahora dicen detestar a este antiguo inspector de hacienda con pretensiones de gran potencia estaban dispuestos a votar por él hace unos cuantos meses. Es probable, sin embargo, que las dramáticas eleccciones de este año acaben siendo consideradas no como un subproducto de un ataque terrorista que acabó llevando a un cambio de gobierno, sino como el final natural de la primera era de la transición a la democracia de la España post-franquista. Lo que viene ahora es una segunda era - la trransición de una democracia sencilla a una más complicada, más sofisticada.
El nuevo gobierno dirigido por José Luis Rodríguez Zapatero ciertamente tiene la oportunidad de lanzar esta segunda transición. No ha perdido tiempo en traer de vuelta a las tropas de Irak, tender una mano abierta a los socios tradicionales de España en Europa y embarcarse en un programa de cambios sociales, prometiendo mantener al mismo tiempo mantener la vieja seguridad de una contabilidad equilibrada, y ofreciendo diálogo y consenso generales.
Popular como es en la actualidad, puede que esta no sea la forma más adecuada de enfrentarse a la nueva situación de España: un país más rico cuyos ciudadanos deberán encontrar en el futuro empleos de mayores ganancias y más productivos que las labores no cualificadas del pasado; una sociedad más diversa que ahora incluye multitudes de norteafricanos y latinoamericanos [Nota del Traductor: y europeos del este, sobre todo polacos y rumanos, y no pocos negros también; ambas cosas suelen sorprender a los anglosajones]; y una sociedad sometida a tensiones internas que tiene que gestionar las diferentes ambiciones de sus pueblos constituyentes - vascos, catalanes, gallegos y el resto - en el interior de una democracia tolerante y sofisticada. Zapatero tiene su oportunidad para comenzar a moldear una nueva España ¿Cuáles son sus perspectivas de éxito?
[este final estaba obviamente destinado a introducir el resto de los artículos del número monográfico]
A la vuelta pasé por al lado de la tuya casa, saqué la cabesa desde mi hauto y grité: CHURETICAS!
una bandada de gabiotar alzó el vuelo, el sol iba sumerjiendose entre las montañias y solo me contestó el eco de mi propia vos...
una bandada de gabiotar alzó el vuelo, el sol iba sumerjiendose entre las montañias y solo me contestó el eco de mi propia vos...
- Nicotin
- Manuel Fraga Iribarne
- Mensajes: 12343
- Registrado: 25 Feb 2003 13:25
- Ubicación: ...ale ...pira.
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Yo le eché un vistazo a la revista en una librería, pero tuve la sensación de haber leído ese artículo ya antes: últimamente los artículos anglosajones sobre España parecen calcados unos de otros.
Con lo que estuve más de acuerdo es con el comentario acerca de las empresas españolas, que, con relación al PIB español y el desarrollo del país, se están quedando muy atrás en cuanto a inversiones exteriores y no digamos en cuanto a competencia tecnológica. Temas que no estaría mal discutir un poco, porque por ahí vienen a medio y largo plazo los posibles nubarrones de la economía española y no por la supuesta burbuja inmobiliaria.
Con lo que estuve más de acuerdo es con el comentario acerca de las empresas españolas, que, con relación al PIB español y el desarrollo del país, se están quedando muy atrás en cuanto a inversiones exteriores y no digamos en cuanto a competencia tecnológica. Temas que no estaría mal discutir un poco, porque por ahí vienen a medio y largo plazo los posibles nubarrones de la economía española y no por la supuesta burbuja inmobiliaria.
The bigger the headache, the bigger the pill. Call me the big pill.
Talmente de acuerdo con Nicotin. Hará cosa de 2-3 meses hubo un especial de España en el Time americano. El artículo es cuasi igual, salvando que el del Time era más extenso y tocaba el tema ese que tanto le gusta a Nicotin de la burbuja inmobiliaria.
¿Para cuando un debate abierto sobre la burbuja Nicotin?.
El moro.
¿Para cuando un debate abierto sobre la burbuja Nicotin?.
El moro.
El perrico, definiendo la HAMBROSIA a ma112nu escribió:Un curasán aceitoso y calentico chorreando en el plato, la sonrisa de un niño, las ttks, un perolo de gazpacho manchego con medio kilo de pan para mojar, las ttks, las pelis de chinos dándose hostias, los ninjas, Mr. T, Mr.T luchando contra los ninjas, cualquier animal comestible, las ttks, correr desnudo por la playa alrededor de la gente mientras silbo el opening de battlestar galactica, la shandy cruzcampo de abadía belga, los torreznos, cualquier cosa rebozada, cagar en espiral, cosas asín, manu, cosas asín.
Nicotin escribió:¿para cuándo uno sobre la competitividad de España?
¿Qué competitividad?
El perrico, definiendo la HAMBROSIA a ma112nu escribió:Un curasán aceitoso y calentico chorreando en el plato, la sonrisa de un niño, las ttks, un perolo de gazpacho manchego con medio kilo de pan para mojar, las ttks, las pelis de chinos dándose hostias, los ninjas, Mr. T, Mr.T luchando contra los ninjas, cualquier animal comestible, las ttks, correr desnudo por la playa alrededor de la gente mientras silbo el opening de battlestar galactica, la shandy cruzcampo de abadía belga, los torreznos, cualquier cosa rebozada, cagar en espiral, cosas asín, manu, cosas asín.
No tenemos la culpa de ser una república bananera en según que cosas. Ahora bien, ese cierto deje victimista que se le ve a alguna mentes preclaras no tiene sentido alguno. Es como ser mongólico e intentar adoptar pose de intelectual bohemio.
En verdá le digo que el día (ese día!) que los chiquillos con 14-15 años sean bilingües* podremos decir que empezamos a tener cierta competitividad.
Mención aparte, claro, a los cocineros vascos que tan alto dejan el pabellon.
El moro.
*tómese como hito ejemplificado, cualquier otro que se le ocurra al lector valdrá igualmente.
En verdá le digo que el día (ese día!) que los chiquillos con 14-15 años sean bilingües* podremos decir que empezamos a tener cierta competitividad.
Mención aparte, claro, a los cocineros vascos que tan alto dejan el pabellon.
El moro.
*tómese como hito ejemplificado, cualquier otro que se le ocurra al lector valdrá igualmente.
El perrico, definiendo la HAMBROSIA a ma112nu escribió:Un curasán aceitoso y calentico chorreando en el plato, la sonrisa de un niño, las ttks, un perolo de gazpacho manchego con medio kilo de pan para mojar, las ttks, las pelis de chinos dándose hostias, los ninjas, Mr. T, Mr.T luchando contra los ninjas, cualquier animal comestible, las ttks, correr desnudo por la playa alrededor de la gente mientras silbo el opening de battlestar galactica, la shandy cruzcampo de abadía belga, los torreznos, cualquier cosa rebozada, cagar en espiral, cosas asín, manu, cosas asín.
Nicotin escribió:Amplíe lo del deje victimista, me interesa.
Catedráticos de Universidad, arengando a las masas, instandoles a que no se duerman en los laureles, que los este-europeos trabajan por menos que nosotros y tiene más preparación y hablan muchisimos de miles de mas idiomas.
Ese mismo catedráctico te dice 'güichiflin' haciendo como el que habla inglés y a duras penas arrastra una carpeta por el escritorio.
¿Hipocresía?.
¿República bananera?.
¿La madre que nos parió?.
El perrico, definiendo la HAMBROSIA a ma112nu escribió:Un curasán aceitoso y calentico chorreando en el plato, la sonrisa de un niño, las ttks, un perolo de gazpacho manchego con medio kilo de pan para mojar, las ttks, las pelis de chinos dándose hostias, los ninjas, Mr. T, Mr.T luchando contra los ninjas, cualquier animal comestible, las ttks, correr desnudo por la playa alrededor de la gente mientras silbo el opening de battlestar galactica, la shandy cruzcampo de abadía belga, los torreznos, cualquier cosa rebozada, cagar en espiral, cosas asín, manu, cosas asín.