En Bastardópolis ya hay carteles en busca de un paladín que tronche a estoque estos tipos: calamidades con pinreles.
Paisanos, ¡alejaos del Cubil Vivero!
Al pasar Nueva Orleans dejo atrás sus lagos iridiscentes y luces de gas amarillo pálido | pantanos y estercoleros | aligátores arrastrándose sobre botellas rotas y latas | moteles con arabescos de neón | chaperos desamparados que susurran obscenidades a la gente que pasa.