Arthur Feelig cuyo verdadero nombre era Usher, emigró con apenas quince años desde la vieja Austria a EEUU. Allí comenzó su trayectoria tras la cámara vendiendo a las madres retratatos que hacía de sus hijos en los parques.
Pronto le ficharon para el New York Times principalmente para que se comiera los turnos de noche que los fotógrafos consagrados rechazaban. De este modo comienza una maravillosa carrera fotográfica que le valió el apodo de Weegee -fonética inglesa de Ouija- por su habilidad para llegar a la escena del crimen casi antes de que éste se realizase.


Lo cierto es que tenía en su desvencijado Chevrolet, en el que prácticamente vivía, una radio con la frecuencia de la policía y claro, así cualquiera. Otra leyenda sobre su apodo se refiere a weegee como el ruido que hacían las fotos reveladas al pasarle el paño para secarlas: “Squeegee, Squeegee”.
De cualquier modo, se ganó a pulso el apodo retratando lo mejor y lo peor de las calles de Manhattan y Harlem de los años 30 y 40, incendios, asesinatos, ajustes de cuenta mafiosos, pero también personas que poblaban las calles, gente miserable, gente sonriente, gente acaudalada, borrachos, prostitutas, niños jugando entre todo lo anterior...





Su fama le valió para participar como secundario en alguna que otra película de Hollywood y de paso, fotografiar unas cuantas estrellas de cine.


Sin embargo, su foto más famosa es la llamada The Critic. Según parece, durante la Segunda Guerra Mundial, Feelig pidió a una amiga con pocos recursos que apareciera en un lugar donde supuestamente acudirían dos damas de la alta sociedad para ir a la ópera: Mrs. George Washington Kavenaugh y Lady Decies. Y efectivamente, allí salieron de una limusina, envueltas en lujos, flores y pieles contrastando con la pobre vestimenta de aquella otra mujer.

El diario se negó a publicar la imagen por resultar demasiado ostentosa para un país que estaba en plena guerra y en realidad no iban nada desencaminados puesto que poco después esa misma foto fue utilizada como propaganda nazi. Charles Kavenaugh estaba escondido en las trincheras en la invasión al Anzio en 1943 cuando del cielo llovieron panfletos reproduciendo The Critic, y bajo los cuales se podía leer: “¿Es esto por lo que están luchando?”. Kavenaugh no cabía en sí de vergüenza al ver que una de las ricachonas de la foto era su abuela .
Weegee aportó al mundo de la fotografía un estilo propio que él mismo bautizó como “Luz de Rembrandt” creando un efecto de expansión en la imagen fotografiada gracias a los juegos luz artificial por los que sentía predilección.
Murió en el 68 de un tumor cerebral, dejándo su tan excelente como duro, sórdido y brutal trabajo en el cual se aprecia como mínimo una gran pasión por las personas.
Woman concerned about the D-Day Invasion, June 7, 1944

When you find yourself beginning to feel a bond between yourself and the people you photograph, when you laugh and cry with their laughter and tears, you will know you are on the right track. Weegee, "Camera Tips"
http://usuarios.lycos.es/luniorni/newpage9.html
http://museum.icp.org/museum/collections/special/weegee/weegee-album.html
http://www.amber-online.com/gallery/exhibition46/notes46.html