pH, más que hamor, frensi.

Iba a decir, qué bien, el presidente del mayor banco en España ya no se llamará Botín. Pero va a ser que sí, sólo que en presidenta.

Lo siento Ramón.

Muerto Isidoro Alvarez, presidente de El corte inglés. Otro brindis!

Lo he puesto ya en Obituarios, pero no sé si alguien apostó por Boyer.

Profecía autocumplida.

Fallece el ex-guitarrista del grupo RIP en pleno concierto.

http://www.20minutos.es/noticia/2297875/0/muere/exguitarrista-rip/concierto/

La Duquesa de Alba termina con su agonía de 25 años y fallece por fin.

Yo sigo esperando que haya un referéndum para erradicar de este país los títulos nobiliarios. A ver si con la momia ésta en el otro barrio algún partido le echa huevos y lo propone.

Yo estoy a favor de los títulos nobiliarios.

Si esta gente quiere mantenerlos debe pagar una tasa y no reportan más beneficios que el que te mencionen en el hola. Así que perfecto.

Con la desaparición de los títulos nobiliarios me refiero más bien a la expropiación de su patrimonio, básicamente.

El patrimonio que posée el ducado de Alba es absolutamente demencial tanto en cantidad como en valor. No es que yo confíe precisamente en el buen hacer de los gestores públicos o gubernamentales, pero sin duda como ciudadano que pretende serlo de un país moderno, las instituciones medievales me tocan la fibra.

Que la pandilla de subnormales que tiene por hijos vaya a heredar cientos de millones de euros en propiedades que deberían ser públicas, por el mero hecho de haber salido del chumino de esta señora, pues hombre, lo puedo entender en el caso de un magnate empresarial como ejemplo del estado capitalista en el que vivimos, pero no en el de una familia elevada al poder por la gracia de la Corona, la Iglesia o Dios hace unos siglos, y mantenida allí por pereza, conveniencia o cobardía.


Luego, si quieren llamarse Duques, o Marqueses, o lo que sea, efectivamente, que pagen y que lo sean.

El principal problema que tiene querer reducir los beneficios de la nobleza es que llevan inevitablemente a hacer lo mismo con la iglesia y, por supuesto, con la monarquía. Y como vivimos en un país en el que esas instituciones se han aliado con la alta burguesía en lugar de enfrentarse en una lucha de poder, pues estamos jodidos por los siglos de los siglos.

Si hemos llegado al siglo XXI con unos cimientos medievales nadie me hace creer que no vayan a seguir instalados en el siglo XXV.

A comer pollas bombeadas por sangre azul hasta que exhalemos el último suspiro.

Venga.