pH, más que hamor, frensi.

Ole, esos cuerpos.....



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Me parece una idea cojonuda que habría que implementar en la playas españolas para mujeres cetaceo de más de setenta kilos, con obligatoriedad bajo pena de lapidación a sandíazas o recolección de balón de nivea hasta donde te lleva la corriente, puta.

Mil veces mayor atentado estético esas carnes grasosas rebosantes que cualquier disfraz de teletubbie moruno.


Pero las buenorras en bolas, eh, a ver que cojones de pais retrogrado va a ser este.

Claro claro, como si fuer preciosisimo ver esas incipientes rajas del culo asomando por vuestros bañadores. Esos que no podéis subir más debido a la barriga que cuelga por encima hasta casi por debajo de los huevos y que no permite ver el estampado del traje de baño a no ser que sea por detrás, pero que tampoco legas a apreciar porque intentas evitar el atentado que supone las ya antes mencionadas huchas masculinas.

No te jode aquí el Mark Vanderloo de la mierda frita...

Ramonchu, últimamente estás que yo te votaría (y te botaría) para presidente.

Por un país sin gordas en sus playas. ¡Por un país donde las gordas sólo salgan en la tele haciendo de marujas!

Además, cuanto menos gordas haya, más subirá su cotización (ley de oferta y demanda pura y dura), hasta que llegue un punto en que sean un bien tan preciado y escaso que se considerará artículo de lujo y se harán concursos donde 50 gilipollas se intenten tirar a Sonia, alias "La Morsa", en la MTV.

Yo lo digo por el bien de ellas, que conste.

¡Como molaría!

Ya me imagino una adaptación cañí con "¿Tienes tal peso? ¿eh, sebosa?" presentado por Nuria Foca y con Miki Puch tal cual -o un poco menos maricón si se puede- o la versión "Faja: A engordar" donde las gordas harían unas perfomances bárbaras hasta comerse los dedos de los pies con mantecaza de bufalo.

Es que es ponerme a crear con gordacas y muto en un Valerio Lazarov encerrado en el cuerpo de Falete -o en su uretra, que también podría ser-.

Pazita escribió:Claro claro, como si fuer preciosisimo ver esas incipientes rajas del culo asomando por vuestros bañadores. Esos que no podéis subir más debido a la barriga que cuelga por encima hasta casi por debajo de los huevos y que no permite ver el estampado del traje de baño a no ser que sea por detrás, pero que tampoco legas a apreciar porque intentas evitar el atentado que supone las ya antes mencionadas huchas masculinas.

No te jode aquí el Mark Vanderloo de la mierda frita...

No te me pongas asín, Pazita, yo creo fervientemente en la paridad y otras tantas discriminaciones positivas al uso, y de hecho cualquier gordo que no sea yo ni siquiera debería pisar la playa aunque vayan disfrazados de boya de altamar, que se queden en los foros del interné que pa algo están, cojones.

Eso sí, al menos nosotros cuando salimos del agua marcamos tol morcillo contra el viento de levante, eh.

Noto vuestras miradas, sé que me deseáis. Hmm, secsi.