pH, más que hamor, frensi.

Dos cigarros

Uno

Caen gotas porque ha llovido.
Suenan. Estallan.
No dejan dormir a la familia de chinos.
Yo, si estoy despierto, no es por culpa de las gotas.

Caen de una en una,
estallando contra el suelo
en medio de la noche.
A veces de dos en dos.
No estoy mintiendo.
A veces cae una gota
-con su consiguiente impacto-
y al momento vuelve a sonar
otra gota y otro impacto.
Esas veces las gotas
caen de dos en dos
aunque caigan de dos en una.

Dos

La cuerda de la ropa está húmeda.
Han debido caer gotas sobre ella.
Gotas de las que esta noche despiertan a los vecinos.
Tiene esta cuerda forma de espiral.
No sé con qué material se ha hecho pero es suave.
Tiene esta cuerda una textura previsible,
nervuda, sensual, retorcida. (Suave.)
En cada uno de sus giros me gusta más,
como cuerda y como instrumento
-yo la toco como un instrumento-.
Parece estúpido contarlo.
El placer cobra formas inesperadas
en la trayectoria que mis yemas recorren por la cuerda.
La perfección es hoy, para mí, tan simétrica como cordial.

[youtube]M8xfzsjB2jI[/youtube]

No dejan dormir a la familia de chinos.

Ésta me ha llegado. Poesía pura.

A mí me ha gustado. Me ha llegado a parecer un cruce entre Carmelo y Mero, salvando las distancias, mira lo que te digo.

Tu, dale, sensible, dale;

Dolordebarriga

¿Pueden los perros enamorarse?

Si tienen ojos,
y tienen boca,
y se comunican y se pueden tocar,
sentir;

si los perros hacen
todas esas pequeñas cosas
y las experimentan como nosotros,
¿pueden llegar a amar a alguien más
que no sea su amo?

Si le puedes enseñar a dar la patita,
si le puedes enseñar a que no cague en la alfombra,
si puedes obligarle a fingir que sea humano
mientras tú te envaneces y él se humilla
por amor –hacia ti–,
podría llegar a rebelar su corazón,
su corazón de perro,
y enamorarse de una bella caniche?

Si le puedes enseñar a hacer esas ridiculeces
tan nuestras, tan de nosotros, de las personas,
como cuando a un poeta le enseñan matemáticas,
quizá y sólo quizá, haya una esperanza,
y algún día se emancipe y deje de ser el apéndice peludo de tus tobillos.

Porque, al fin y al cabo,
hasta el más obediente de los perros
se hace alguna vez pipí en la alfombra.

Haiku


La telaraña
nos mira siempre después
de hacer el amor.

Hombre Sensible escribió: [mientras tú te envaneces y él se humilla
por amor –hacia ti–,

Técnicamente no es por amor, sino por instinto gregario de sumisión a los individuos dominantes de la manada.

Nicotin escribió:Técnicamente no es por amor, sino por instinto gregario de sumisión a los individuos dominantes de la manada.

Pos eso.

instinto gregario de sumisión a los individuos dominantes de la manada

Yo siempre he pensado que el amor era eso.

Los bebés no son "individuos dominantes de la manada" y sin embargo la gente siente amor hacia ellos.

...Einsteins.