Joder, es que hubo un día en que creí que iba a tener que quedar con personas DE VERDAD en un bar a tomar una cerveza, qué indignación.Ruttiger escribió: ↑11 Jun 2019 09:08 Estas semanas me han servido para darme cuenta de la cantidad de tiempo que he estado perdiendo en el foro y del montón de cosas que me estaba perdiendo por estar todo el día aquí metido. Menos mal que lo habéis salvado, que puta mierda el mundo real, qué puta mierda.
Y me sumo a las gracias a Loles, al Moro, al Rancheras y a todos los responsables y a los irresponsables que hacen realidad mis ansias de asocialidad.
Le mandé un email a Polina que ella me dijo que posteara aquí cuando el foro volviera, da una idea de mi estado de desesperación (tened en cuenta que no tenía el chat aún, ni forma de contactar con nadie que no fuera Polina):
A partir de ahí Polina me tranquilizó como hace la Romanov con Hulk, y luego salió el chat y luego YA TAL.Ay, Maria Polina de mi vida, ¿qué clase de broma macabra es esta? ¿Realmente volverá algún día el foro? En días como hoy, en que el dasasosiego se cierne sobre mi alma como una tormenta de verano, el foro era mi única vía de escape, y evitaba que me lanzara a la calle a comprar chocolate, violar mujeres y apedrear los escaparates de las tiendas de lencería, no necesariamente en este orden. Si el foro es un bastón que ayuda a caminar a los cojos de espíritu, una luz que ilumina el camino de las almas ciegas y nutre las resecas plantas de la cultura popular, maná enviado por... (bueno, basta, ya te haces una idea) puedes imaginar lo que suponía para los pobres enfermos mentales que encontrábamos cobijo en entre estas pantallas ante nuestro creciente y ya total aislamiento del mundo analógico. ¿Qué es lo que SE ME ESTÁ PIDIENDO? ¿Qué vaya a un bar atestado de GENE NORMAL, de carne y hueso, y entable conversación con algún sujeto humano de dudosa empatía, conversación plana y escasas luces? ¿Por qué? ¿No son capaces de arreglar el maquinillo? O, dicho de otra manera: ¿está todo perdido? Porque las jornadas laborales se me hacen eternas, no tengo con quien comentar "Chernobyl"... ¿A quién le cuento yo que "Venom", precedida por unas críticas horribles, me parece la mejor película de Marvel sin ser de Marvel? ¿Eh? ¿Con quién hablo yo de esto? Por no hablar de mis airadas críticas a Errejón, mi indignación ante la fusión de Fiat y Renault, y otros temas de interés general. ¿A quién le suelto mis frustraciones con la puta sentencia que no sale y otros cotilleos sobre la loca demandante de última hora, recién saliditos del horno más caliente del pasilleo laboral? ¿No se me estará sugiriendo (no lo puedo creer, no) que mejor haría en trabajar con más intensidad, evitar entrar a intertet, foco de todas las pestes modernas, la rata cibernética que propaga las plagas bíblicas? ¿Acaso Ellos tienen algo que decirme? Tenía muy controlado mi consumo de azúcar, y la forzada abstinencia foril está boicoteando toda expectativa de moderación: ahora lamo hasta los palos de chupa chups mondos y lirondos que encuentro en mi cajón. Si el foro era la sublimación de mis más oscuras pasiones desatendida (tú ya sabes cuáles son, no te hagas la loca) ¿qué clase de señal divina es la que se me está enviando? Nutella y viaje a Los Ángeles, a secuestrar a Scarlett. Compra compulsiva de relojes y navajas por Internet. Deseos de cambiar de moto por otra más gorda. O (¡¡lo que aún sería peor!!) invertir absurdas cantidades de dinero en personalizar la que ya tengo, poniéndole reflectantes, espejos retrovisores carísimos y estúpidos focos que no necesito para nada. Todo por Su Culpa, administradores del diablo, que aspiran a mantener un pHoro pero, en el fondo, no son sino aprendices de brujo jugando con la psique de personas necesitadas de amor, cariño y atención. Y luego volverán, y tendremos que postrarnos a sus pies, como si fueran inocentes ídolos (¡¡de barro!!) que exigen su tributo a sus pobres súbditos, lentos de mente y pobres de corazón. Y se considera gente de bien. Y van a votar, el día de La Fiesta de la Democracia. Pagan sus impuestos. Recogen las heces de sus perros en bolsas de plástico (¡¡plástico, qué cinismo!!), ayudan a cruzar la calle a viejecitas indefensas. Pero nos quitan nuestra Ágora, nuestra plaza del pueblo, nuestro sitio para comer pipas Facundo. Malditas y purulentas ratas de cloaca, eso es lo que son.
Pues bien, yo digo: ¡JA! Y lo digo bien alto, ¡JA!, y pongo los brazos en jarras, y adopto una actitud amenazante ante la pantalla. Y me indigno fuerte, y como no tengo Twitter, en lugar de andar por ahí señalando que Rodríguez Almeida (por Dios, personas madrileñas) se parece a Rick Moranis, que YA LO HA DICHO TODO EL MUNDO, pero la nostalgia de los 80 es poderosa, pues me dedico a escribirte, a ver si me das buenas noticias (¡el pHoro vuelve!) o malas (¡el foro está perdido!). Que si fueran malas, yo pienso irme a un foro muy loco de trapecistas y fans del Circo del Sol y Eurodisney, regatistas de vela y embalsamadores de cadáveres.
Cuéntame, cuent you.