[Dragó Powa] El último libro que te has leído.

[Cristofín]

A quien fuera que nombrara a Santiago Lorenzo, desde aquí le envío mi admiración desmedida. Si bien es cierto que Los Huerfanitos no me está entusiasmando, Los Millones es maravilloso y Las Ganas me dejó ojiplático. Qué joya de autor, qué descubrimiento. Esto sí que es gozar y no el sexo sin amor. Y el sexo.

[M. Corleone]

A quien fuera que nombrara a Santiago Lorenzo, desde aquí le envío mi admiración desmedida. Si bien es cierto que Los Huerfanitos no me está entusiasmando, Los Millones es maravilloso y Las Ganas me dejó ojiplático. Qué joya de autor, qué descubrimiento. Esto sí que es gozar y no el sexo sin amor. Y el sexo.

¿Y no has leído "Los asquerosos"?

[Cristofín]

Nope. Durante este encierro he leído cinco libros y he dejado uno a medias (siento decírtelo, pero se trata de Las Ratas, de tu querido Delibes). Dos han sido de Santiago Lorenzo y los otros tres los compré al azar y me han gustado los tres (no son nada conocidos, de hecho antes de comprarlos busqué reseñas y no encontré ninguna).

En cuanto acabe Los Huerfanitos me planteo empezar Los Asquerosos, aunque es cierto que después del subidón de Las Ganas el bajón de nivel es notable.

Por cierto, de los tres que compré al azar, creo que te gustaría (y además se lee en un plis) El Patio Inglés:

https://www.casadellibro.com/libro-el-p ... 33/2395355


La nueva novela de Gonzalo Garrido es una historia íntima y universal sobre la vida, el desencanto y el dolor. El autor de Las flores de Baudelaire centra su atención en los conflictos familiares, en lo injusto de algunos planteamientos de nuestra sociedad, en la dificultad para afrontar nuestro propio destino.

El protagonista, Pablo, es un joven de los años ochenta que ha comenzado Derecho y que vive con su familia en un piso que da a un patio inglés. Los fines de semana sale con sus amigos a emborracharse, ha tenido alguna novia y forma parte de un círculo literario que le ha permitido publicar un artículo bastante polémico en un periódico. Sus padres le notan distante, apático y a vueltas con el mundo, una actitud común en la gran mayoría de los adolescentes. Sin embargo, un día, ante el asombro e incomprensión de sus progenitores, abre la ventana del comedor y se lanza al vacío.

[M. Corleone]

Nope. Durante este encierro he leído cinco libros y he dejado uno a medias (siento decírtelo, pero se trata de Las Ratas, de tu querido Delibes). Dos han sido de Santiago Lorenzo y los otros tres los compré al azar y me han gustado los tres (no son nada conocidos, de hecho antes de comprarlos busqué reseñas y no encontré ninguna).

En cuanto acabe Los Huerfanitos me planteo empezar Los Asquerosos, aunque es cierto que después del subidón de Las Ganas el bajón de nivel es notable.

Por cierto, de los tres que compré al azar, creo que te gustaría (y además se lee en un plis) El Patio Inglés:

https://www.casadellibro.com/libro-el-p ... 33/2395355


La nueva novela de Gonzalo Garrido es una historia íntima y universal sobre la vida, el desencanto y el dolor. El autor de Las flores de Baudelaire centra su atención en los conflictos familiares, en lo injusto de algunos planteamientos de nuestra sociedad, en la dificultad para afrontar nuestro propio destino.

El protagonista, Pablo, es un joven de los años ochenta que ha comenzado Derecho y que vive con su familia en un piso que da a un patio inglés. Los fines de semana sale con sus amigos a emborracharse, ha tenido alguna novia y forma parte de un círculo literario que le ha permitido publicar un artículo bastante polémico en un periódico. Sus padres le notan distante, apático y a vueltas con el mundo, una actitud común en la gran mayoría de los adolescentes. Sin embargo, un día, ante el asombro e incomprensión de sus progenitores, abre la ventana del comedor y se lanza al vacío.

Pues sí, igual me gusta. Aunque estoy leyendo muy poco...

Que no te haya gustado "Las ratas", que es lo más mejor del mundo, es para matarte a palos.

Hazme una review de todos esos que has leído últimamente, a ver si me inspiro y retomo la lectura.

[golondrino]

Este libro me ha puesto de mala hostia, me ha dejado mal cuerpo y mal sabor de boca. Hace que me reafirme aún más en mis principios.

[Cristofín]

Que no te haya gustado "Las ratas", que es lo más mejor del mundo, es para matarte a palos.

Hazme una review de todos esos que has leído últimamente, a ver si me inspiro y retomo la lectura.

Me sabe mal no haber terminado Las Ratas, pero venía de subidón del libro anterior y se me hizo pesado y plano. Ya sé que te gusta Delibes, yo he leído un par de libros suyos y no tenía queja hasta ahora. En fin, no era el momento.

Por lo demás, sabes que te haría una review encantado de la vida, pero sabes que vendo mal los libros, ¿no?

[M. Corleone]

sabes que vendo mal los libros, ¿no?

No se trata de "vendérmelos", sino de que los comentes, yo curioseo y después ya me hago una idea de si me apetecen o es Shantaram 2.0.

[Perro De Lobo]

Este libro me ha puesto de mala hostia, me ha dejado mal cuerpo y mal sabor de boca. Hace que me reafirme aún más en mis principios.

No conocía el título ni al autor, pero tras búsqueda en la Wikipedia me lo apunto para futura incorporación a la colección de Gótica.

Yo sigo, de manera inconstante, con Lectura Fácil. Estoy tardando mucho en avanzar, no porque no me guste (todo lo contrario), sino porque también estoy adoleciendo de la falta de concentración necesaria para ir más a saco con la lectura durante el puto confinamiento. Lo poco que leo, lo estoy disfrutando mucho.

[Cristofín]

sabes que vendo mal los libros, ¿no?

No se trata de "vendérmelos", sino de que los comentes, yo curioseo y después ya me hago una idea de si me apetecen o es Shantaram 2.0.

El de El Patio Inglés ya te lo puse ayer. Este otro libro también me agradó. Aun a pesar de que tenía pinta cutre he de decir que me sacó varias sonrisas y se me hizo muy ameno. Luego se lo dejé a un vecino que vive solo y también le gustó, así es que te lo recomiendo:

ESTE MUERTO NO LO CARGO YO (María Clara Rueda)

Diego Almeida no es valiente. Solo es un tipo cualquiera. O lo era. Dejó de serlo el día en que aceptó la invitación de un fulano para pasar en su casa lo peor de una borrachera espantosa. Ese día el mundo se le vino encima. O acabó de venírsele porque ya desde antes la cosa iba en bajada. Aun así, si tuviera que jurar, si tuviera que elegir entre los muchos desastrosos momentos de su infeliz pasado, sin duda elegiría ese como el día en el que para él comenzó el infierno.Y Almeida no está bien preparado: abogado comercial (desempleado), pelele sin remedio (según su madre) y amante regular (según él mismo), Diego no ha visto en su vida un cargamento de coca, no sabe una palabra sobre la trata de blancas y jamás, jamás, ha asesinado a nadie. Por culpa de ese mal momento, ahora tendrá que aprender, y rápido, a deshacerse de cadáveres que empiezan a oler en serio, a fabricar otros antes de que los vivos acaben con él, a salvar el pellejo sin poder confiar en nadie. En su haber tiene: la notable elasticidad de sus escrúpulos y una absurda, patética, incapacidad de creer en su mala suerte.

[Cristofín]

Añado La Sospecha de Sofía (Paloma Sánchez-Garnica), libro que me ha dejado un cuerpo regular y que me ha gustado mucho, yendo de menos a más con una historia muy bien hilada:

AÑO 1968. En una Europa dividida por un muro insalvable, dos hombres y una mujer buscan desesperadamente su destino.
La anodina vida de Sofía y Daniel cambia radicalmente cuando él recibe una carta anónima en la que se le dice que Sagrario, a la que venera, no es su verdadera madre y que si quiere conocer la verdad de su origen debe ir a París esa misma noche. Intrigado, pregunta a su padre por esta cuestión y él le recomienda que lo deje pasar, que no remueva el pasado. Sin embargo, hay preguntas que necesitan una respuesta y esta búsqueda desencadenará una sucesión de terribles acontecimientos y encuentros inesperados de infortunado desenlace que trastocará su vida y la de su mujer, Sofía, para siempre. Madrid, París y su mayo del 68, el muro de Berlín, la Stasi y la KGB, los servicios de contraespionaje en la España tardofranquista y tres personajes en busca de su identidad son las claves de esta fantástica novela con el inconfundible sello de Paloma Sánchez-Garnica.


El libro tiene párrafos enteros para subrayar. Este es uno de los que apunté:

""No se pueden imponer a la fuerza unos ideales por muy loables y encomiables que sean. Si les privas a la gente de libertad no podrás convencerlos nunca, y mucho menos a la juventud que necesita volar y elegir y equivocarse, y caer, y levantarse, y triunfar y rendirse, y hasta fracasar. Los jóvenes necesitan vivir su vida, no la que les impongan un grupo de prebostes desde un despacho, pretendiendo controlar hasta el número de los latidos del corazón... Pero la culpa la tuvimos nosotros, los mayores, convencidos de que hacíamos lo mejor, que este era el sistema perfecto, controlar todo para que todo funcionara mejor. ¡Qué error, qué grandísimo error! Perseguimos una utopía y caímos de bruces en ella, nos hemos roto la cara y ahora no sabemos qué somos ni qué lugar ocupamos en un país que nos considera de segunda clase. La libertad es lo único valioso".