[Dragó Powa] El último libro que te has leído.

[dunker]

Yo quiero ber a Blanqui comiendo un calippo de fresa.

[Blanquita]

Yo quiero ber a Blanqui comiendo un calippo de fresa.

Pero...el de lima limón es mucho mejón.

[dunker]

Yo quiero ber a Blanqui comiendo un calippo de fresa.

Pero...el de lima limón es mucho mejón.

Te deja la lengua berdosa. ¡Con el de fresa no se nota!

[Blanquita]

Lo mejon del calippo, el líquido del final.

[poshol na]

Yo quiero ver a Blanqui tragándose el líquido del final.

[PrimeroDerecha]

A este señor ni puto caso, que es fan de Luis García Montero.

Y tertuliano de la COPE.

[Perro De Lobo]

¿Hay alguien a quien pueda no gustarle Carver? Inconcebible, pero nunca se sabe.

A mi me gusta mucho -polémica Lish aparte- , pero en dosis pequeñitas. Para sentir la desesperación mundana y un horizonte frío y vacío de sueños, ya están los lunes y la linea 6 del metro.

Yo venía a postear un extracto de "Herbert West, reanimador", de H.P. Lovecraft, que es tan exageradamente racista que se me saltaron las lágrimas de la risa al leerlo.

En el combate se enfrentaron Kid O'Brien -un joven torpe y ahora tembloroso, con una nariz ganchuda muy poco irlandesa-, y Buck Robinson, «EI Betún de Harlem». El negro fue noqueado; y tras un breve examen, nos dimos cuenta que no se recuperaría. Era un ser repugnante, con pinta de gorila, unos brazos anormalmente largos que me parecían de manera inevitable patas anteriores, y una cara que irremediablemente hacía pensar en los secretos insondables del Congo y las llamadas de tam-tam bajo una luna misteriosa. El cuerpo debió tener peor aspecto en vida, pero el mundo contiene mucha fealdad. Aquella gente despreciable estaba asustada, ya que no sabían que podía exigirles la ley, si el caso llegaba a conocerse; y se sintieron agradecidos cuando West, a pesar de mis involuntarios estremecimientos; se ofreció a librarles del cuerpo en secreto... puesto que conocía muy bien sus intenciones.

[Gandalfini]

Amelie Nothomb - Higiene del Asesino. Me lo he zampado en una tarde y un par ratos en el metro, cosa muy rara en mí. Me ha encantado. Novela en forma de cuatro entrevistas a un escritor muy particular y desquiciado.

Spoiler: mostrar

Me encanta el señor Prétextat Tach. En la primera entrevista ves lo inteligente e hijo de puta que es. En la segunda y tercera lo hijo de putísima que es y lo tarado que está y ya sientes mucho asco. En la última las cotas de locura que alcanza y los discursos que se marca son del estilo de Brando haciendo de Coronel Kurtz, es la misma locura desquiciada y terrorífica con una entrevistadora que acaba tomando un papel mezcla del de Dennis Hopper y Baldwin en la película.

El final lo acepto, me recordó a una cosa apoteósica, salvando la distancia, tipo El Perfume donde ya todo acaba descontrolado. No me suelen gustar esos finales pero en este caso, aunque lo que me ha fastidiado es que se veía venir un poco, creo que es una forma de acabar que cuadra bastante con la historia.

[curreta]

Una hembra humana random comiendose un calippo.

[dunker]

De fresa, además.