La mujer de mi vida.

Adoradores de Ken Follet, seguidores del Marca, Gafa-Pastas afiliados al Kafka, histéricos del Harry Potter...
Avatar de Usuario
Barbie Superstar
Warrilla
Mensajes: 555
Registrado: 24 Feb 2003 17:04
Ubicación: Sepultada bajo mis complementos

Mensaje por Barbie Superstar »

Dolorcín, esto es de lo mejorcito que has escrito por aquí.

Un besazo meloso.

Barbie.

PD: Marietta y yo te echamos de menos xDD

Avatar de Usuario
Don Tristón
Mojahedín
Mensajes: 444
Registrado: 15 Dic 2003 15:12
Ubicación: En la farola más próxima

Mensaje por Don Tristón »

...
Última edición por Don Tristón el 01 Abr 2007 13:55, editado 2 veces en total.

Avatar de Usuario
Don Tristón
Mojahedín
Mensajes: 444
Registrado: 15 Dic 2003 15:12
Ubicación: En la farola más próxima

Mensaje por Don Tristón »

...
Última edición por Don Tristón el 01 Abr 2007 13:56, editado 1 vez en total.

Avatar de Usuario
Don Tristón
Mojahedín
Mensajes: 444
Registrado: 15 Dic 2003 15:12
Ubicación: En la farola más próxima

Mensaje por Don Tristón »

Acabo de enviar por mail este último relato, y me han dicho que está rondando por internet uno similar. Y yo pensando que mi idea era bastante original.

¿Cuánto de cierto hay en esto? Y si es así, ¿alguien puede pasarme ese relato?

Gracias.

Avatar de Usuario
Juggernaut
Hombre de Mundo
Mensajes: 4904
Registrado: 02 Ago 2003 12:35
Ubicación: en una galaxia lejana, muy lejana

Mensaje por Juggernaut »

Sólo puedo ser feliz si la complazco.

Intenté no pensar en Ella durante mucho tiempo, negarla, no aceptar su existencia. Entonces, Ella se hacía la dolida, se ocultaba, pero siempre le notaba esa sonrisa maligna que me decía que pronto volvería a saber de Ella.

Al final, dejé de intentar darle la espalda y la acepté como mi dominatriz particular. Y ahora, cada vez que veo a otros que quieren esquivarla, no puedo dejar de pensar en lo que van a sufrir sus pobres almas torturadas cuando Ella les clave las garras que les tiene guardadas.

No dudéis, Ella tiene algo para cada uno de vosotros y vosotras.

Hasta que ya fui un poco más crecido, no entendí claramente que era Ella la que dominaba mi vida, pensaba que mis acciones eran el resultado de mis propios deseos. Así conseguí negar Su verdad por mucho tiempo. Después me di cuenta de que todo mi dolor, mis problemas, y la pena de mi corazón eran debidos a Ella.

La primera vez que quise desoir su llamada a propósito, una vez conocida su existencia, pensaba que ya había tenido suficiente de Ella, y que por fin había llegado mi momento de ser feliz. Ella se sintió traicionada, y se retiró, no sin antes advertirme que pronto oiría hablar de Ella.

Qué razón tenía... cuando por fin llegó su ataque, fue mortífero, me dejó tumbado en el suelo, de tal modo que creo que nunca me he podido volver a levantar. Desde entonces soy incapaz de sentir. Perdí mi casa, perdí mi dinero, y perdí mis sentimientos.

Insensato de mí, volví a desafiarla. Volví a enamorarme, y pensé que esta vez le daría esquinazo, que esta vez podría escapar al cruel destino que tenía reservado para mí. Pobre infeliz, La oía reirse en mi interior, por mis fútiles esfuerzos de zafarme de Ella.

Esta vez ya sabía lo que pasaría, ya no me pilló tan desprevenido. El dolor fue igual de intenso, aunque mi capacidad de aceptar lo inevitable había crecido a la par que mi miedo y mi respeto por Ella.

Y hoy, he descubierto que no puedo esquivarla, que jamás podré. Que estoy predestinado a Ella. Jamás seré libre, jamás podré desoir su llamada. Es curioso como esa sensación La calma. Es entonces, cuando la reconozco como mi amante predestinada, que me deja hacer lo que quiera, que me permite ser feliz... porque, en un trato de amistad por mi reconocimiento, simplemente, me deja para el último.

Es su trato de favor con sus adoradores.

Ahora se que mi tiempo tiene un límite, que Ella me impondrá en cuánto me llegue el momento, y que mientras tanto, me dejará vivir, siempre que en el fondo de mi corazón, en los momentos antes de dejar pasear mi mente por el rincón de los sueños, La recuerde y no olvide nunca la pena, el dolor, la tristeza, y el absoluto convencimiento que todo a mi alrededor tendrá un fin, volveré a provocar dolor, volverán a provocarme dolor, y todo lo que ha existido desaparecerá de la noche al día.

Al fin, he descubierto que Ella es mi dueña. La Fatalidad, mi tierna amante, mi destino. Ya nunca me apartaré de ti.
Este es un mundo de estúpidos, controlados por imbéciles, para beneficio de mediocres.

Úrsula
Perro infiel amiricano
Mensajes: 5
Registrado: 09 Dic 2003 13:33

Mensaje por Úrsula »

Juggernaut escribió:Sólo puedo ser feliz si la complazco.

No se trata de complacerla. Sólo de aceptar que existe.

Ella se hacía la dolida, se ocultaba, pero siempre le notaba esa sonrisa maligna que me decía que pronto volvería a saber de Ella.


Ella nunca se oculta. Nosotros no queremos verla, la esquivamos, eso es todo. Y entonces somos prisioneros de nosotros mismos.

Hasta que ya fui un poco más crecido, no entendí claramente que era Ella la que dominaba mi vida


Tú dominas tu vida, no ella. Ella sólo es una compañera más. Lo no debes hacer nunca es ignorarla.

Esta vez ya sabía lo que pasaría, ya no me pilló tan desprevenido.


Eso está bien, pero la pregunta que debes hacerte es....¿y a los demás? ¿Les pilló desprevenidos? Si tú ya sabías lo que pasaría, ¿lo compartiste con quién hizo falta? ¿O dejaste que ella actuara resguardándote sólo tú?

Jamás seré libre.


Falso. Serás libre en cuanto la vivas como a una más.

Ella está al mismo nivel que el Amor, que la Amistad, que la Tristeza, que El Dolor. Tú la has subestimado, cierto. Pero eso no significa que ahora tengas que convertirte en su esclavo. Ella no quiere cobardes, ni pesimistas. Ella quiere valientes. Porque ante la valentía, ella no desaparece, pero sí rinde respeto y concede treguas. Espero que te ayude entender esto.

Un saludo.

Avatar de Usuario
Juggernaut
Hombre de Mundo
Mensajes: 4904
Registrado: 02 Ago 2003 12:35
Ubicación: en una galaxia lejana, muy lejana

Mensaje por Juggernaut »

Eh... aclaración: sólo era un cuento.

Te pasan cosas, te ocurren cosas, ves cosas, oyes cosas, y decides tergiversarlas para hacer un cuento. Nada es real.

"No hay banda, no hay orquesta".

Pero bueno, mi personaje agradece tus consejos. Aunque como es un poco pesimista, creo que no saldrá de ese pozo donde se ha caído.
Este es un mundo de estúpidos, controlados por imbéciles, para beneficio de mediocres.

Úrsula
Perro infiel amiricano
Mensajes: 5
Registrado: 09 Dic 2003 13:33

Mensaje por Úrsula »

Juggernaut escribió:Te pasan cosas, te ocurren cosas, ves cosas, oyes cosas, y decides tergiversarlas para hacer un cuento. Nada es real.


Mi respuesta tampoco era real.

Juggernaut escribió:Pero bueno, mi personaje agradece tus consejos. Aunque como es un poco pesimista, creo que no saldrá de ese pozo donde se ha caído.


De nada. Y el que dice que no va a salir del pozo es el que sale antes, fijo.

Avatar de Usuario
Criadillas
Palomitero mórbido
Mensajes: 16774
Registrado: 01 Ago 2003 19:38
Ubicación: En la calle del pepino.

Lo trágico es magnético - Circodelia.

Mensaje por Criadillas »

Otra noche de glorias perdidas.

Oportunidades gastadas, nuevas muescas en el revólver de juguete.

Y volver a casa con el rabo entre las piernas, medio devorado. Engañado por los lobos que se visten de Caperucitas. Salvado por muy poco...

Y pese a que ésta pudo ser la noche en la que salvar el pescuezo, las heridas han sido terribles, y me temo que volveré a caer fulminado.

Jodida inconstancia.

Y esperar a buscar el antídoto idóneo dentro de seis días. Y mientras tanto curarme los destrozos, envolverme en la rutina diaria, olvidarlo todo hasta que sea demasiado tarde.

Y volver a caer en ese preciso instante, por supuesto.

No hay mal que cien años dure.

Y mientras tanto, seguir sondeando hasta encontrarla...
Dunkis dijo:

Criadillas es un hombre triste de derechas, quién lo iba a decir.

Avatar de Usuario
FuSiLeRo
perro infiel bretón
Mensajes: 50
Registrado: 21 Abr 2004 20:51

Mensaje por FuSiLeRo »

Luz, eres ella. Ella es tu luz. Te ves reflejada en su piel abominable, yo, en sus ojos tostados teñidos de negra sangre. Sus pestañas infernales y arqueadas atraviesan mis pupilas. Veintinueve días hace que la vi. El rito se celebra cada mes, cada mes lo celebro. Mañana hará dos años que la conozco, aunque, realmente, hace cinco años que nos conocemos. Le llevaré flores de viento soleado para celebrar nuestro segundo aniversario. Y bombones de mar. Y ojos de mercurio rojizo. Y mariposas.

Recuerdo nuestra última cita, nuestra última encrucijada por los mares cadavéricos. Las oleadas de luna daban un brillo continuo, infinito y borracho, un brillo drogado a su rostro plácidamente dormido. Y qué decir de sus cabellos, sus serpientes negras, tan cálidas que parecían estar vivas cuando las removía y revoloteaban entre mis dedos. Y soplaba a sus labios para deshacerme de la tierra amontonada en ellos. Entonces se me antojaba pensar que iba a sonreír, pero no había expresión alguna en su rostro. La cogía entre mis brazos, y los suyos bailaban, sin ritmo, tras mi espalda. La estrujaba contra mí y era el momento: la besaba con el ardor y el frenesí de las margaritas perfumadas con vino. Pero ella seguía quieta y preciosa, inmóvil, incendiada. Y cuanta más tristeza se apoderaba de mí porque no se movía, mis movimientos más tristes eran, más moribundos, más sabedores de que era imposible hacerla ser como yo era ahora. Antes fue tan parecida a mí y no la quise, y ahora, ahora no lo era y quería que lo fuese. Me rendía tras satisfacer mis deseos y aceptar que no era posible hacerla reaccionar. La metía en su cama de madera blanca y la arropaba con el aire que provenía de la iglesia.

Pero no importaba que no se hubiese inmutado. Después de un mes querría volver a verla estirada, querría volver a besarla como hoy haré si mi cuchara de hierro aparta la tierra que nos separa a ella y a mí.

Responder