Stewie escribió:En el ambiente de camisa y corbata ella tiene muchas más posibilidades de contar con licenciatura e idiomas, si eso no es un cambio respecto al analfabetismo funcional a la hora de hacer las maletas y irse si vienen mal dadas, ya me dirás tú qué entiendes por "escapatoria".
Estás completamente equivocado. Lo de pensar en términos de "posibilidades de escapatoria" y más aún asociándolos a la situación social y económica, es una trampa típica en la que cae mucha gente por mero simplismo y/o desconocimiento. Es la típica "verdad aparente" que puede ser corroborada con algunos ejemplos marginales, pero invalidada con muchos más ejemplos que no tienen nada de marginal y que más bien al contrario constituyen el verdadero núcleo del asunto, al menos en la España del 2009.
La "escapatoria" no depende de que la mujer tenga un sueldo o tenga a dónde ir o
tenga independencia económica. En algún caso aislado puede que sea así, pero sería la excepción a la regla porque siempre hay casos particulares para todos los gustos.
La escapatoria es un mecanismo
psicológico, no económico ni social, que deshace la
relación de maltrato, y mientras ese mecanismo no salta, la mujer está atrapada SIN que tenga demasiada importancia su nivel cultural o económico. Ella puede tener millones en el banco y 200 mansiones a donde salir huyendo, pero la cuestión es: ¿va a huir o no? ¿realmente su huida depende de cuánto dinero tenga para el billete de tren, o depende de si está en disposición psicológica de coger ese tren?
Porque a ver: ¿el que sea económicamente independiente, inteligente y cultivada, hace que una mujer no pueda albergar sentimientos de dependencia, de culpabilidad, de sumisión? ¿La convierte automáticamente en una mujer completamente madura y racional? O por el contrario, ¿el que una mujer sea muy pobre e inculta la convierte automáticamente en un individuo dependiente, inmaduro y vulnerable? Hay mujeres que se alimentarían a base de raíces o trabajarían limpiando mierda sin guantes a cambio de unas lentejas con tal de no aguantar una relación de maltrato. Y alguien que en España está dispuesto a hacer eso, es alguien que siempre tendrá a donde ir, ¿no te parece?
En cuanto a los apoyos externos de la mujer maltratada, lo que cuenta es si tiene una familia/entorno dispuesto a estar atento a sus necesidades y a intervenir a pesar de lo que la intervención conlleva y el conflicto muy gordo que la intervención suele generar. Lo que se llama una "red social" (nada que ver con Facebook).
Y el tener una buena red social no depende ni de estudios ni de dinero. Una red social que pueda dar soporte emocional y esté dispuesta a meterse en terreno pantanoso (porque meterse en medio de una pareja puede ser muy desagradable y levantar unos follones de la hostia) puede darse o no darse lo mismo entre gente humilde y analfabeta que entre gente rica y cultivada. Todo depende de sus patrones de relación y afecto, no del dinero que tengan o de los títulos universitarios que cuelguen en sus paredes.
No me acuerdo quién decía "Las familias felices son todas iguales, pero las desgraciadas, cada una es desgraciada a su manera".
Aunque estoy de acuerdo con la cita en sí (y sólo con la cita):
Otro error básico y bastante común es identificar carencias en el entorno con "familia desgraciada", o pensar que una familia disfuncional es algo que puede ser detectado a simple vista.
Te diré algo, que es una de las pocas cosas que me atrevo a afirmar
rotundamente en torno a estos temas:
-No importa lo cerca que tengas a un individuo o familia, no importa lo mucho que le conozcas: la disfuncionalidad es, a veces, casi completamente invisible hasta que ya es demasiado tarde.
Yo lo comparararía con la salmonella: puedes ver un alimento que sabe y huele bien, que no resulta sospechoso, y que no sabes que está podrido hasta que te lo has comido y pasan bastantes horas. La única forma de detectar la bacteria es mirándolo al microscopio.
Y es muy difícil mirar al microscopio a una persona o una familia. El "microscopio" que empleas en realidad no es tal: es más bien un conjunto de criterios producto de la experiencia, detalles a veces nimios que aprendes a relacionar con cosas más gordas que hay detrás. El poder reconocer ciertos "síntomas" de que algo no va bien, síntomas a los que al principio no les darías importancia (porque en sí,
no son importantes) y que incluso no llegarías a percibir si no los buscas de antemano.
Lo que quiero decir es: resulta difícil, pero
posible, detectar a un futuro maltratador cuando no está en situación de maltratar a nadie. Lo que ocurre es que no necesariamente le vas a detectar con los síntomas que esperarías encontrar. Quizá no haya a la vista nada muy obvio y es posible que no te salte la alarma en absoluto. La imagen del maltratador como un gorila cani primitivo encaja tan bien que te hace olvidar cuál es la esencia del asunto.
Porque sí: hay muchos maltratadores con corbata, que maltratan a personas inteligentes, cultas y con la suficiente pasta en el banco como para salir por patas.
Chiflágoras escribió:Pos no lo sé Shiz. ¿Los antisociales tienen hijos idem por criarse en un ambiente poco recomendable o por recibir genes re-idem? Sólo sé que normalmente se carga las tintas sobre lo primero (sociólogos y demás -ólogos atascados entre Ana Rosa la pseudosiensia y Froid

) y se olvida lo segundo, quizá por incómodo además de enrevesado. Si tuviera que apostar me quedo con el fifty-fifty
Yo creo que la educación y el entorno son el factor más importante (es más, diría que decisivo) en la inmensa mayoría de individuos.
Ahora bien, también creo -aunque no tengo modo de probarlo- que hay gente, poca, pero la hay, que nacen con la predisposición genética a ser unos hijos de la gran puta y que lo terminan siendo pese a crecer en un ambiente adecuado.
Creo que en ciertos asuntos las predisposiciones genéticas son obviadas una y otra vez y que en algunos casos ni siquiera está "socialmente", "mediáticamente" o "académicamente" permitido que entren a formar parte de la discusión. Por ejemplo, la sola mención de la
posible influencia genética en la orientación sexual o la identidad de género equivale poco menos que a una provocación fascista (la gente se empeña en considerar sinónimos "predisposición genética" y "enfermedad", cuando por ejemplo, el que tengamos cerebro u ojos... ¡también es una predisposición genética!), mientras sí se barajan alegremente las posibilidades genéticas en las esquizofrenias, autismos y psicosis varias, e incluso en ciertas fobias, y nadie parece escandalizarse por ello. Como tampoco nadie se escandaliza cuando se afirma que los genes determinan en buena parte el CI de una persona, su altura, su peso o el color de sus ojos.