JorgitoForeman escribió:En las elecciones del 33 Alemania estaba en la mayor crisis de su historia. Económica, social, anímica ,política...
La humillación arrastrada tras la Gran Guerra, las condiciones de Versalles, la Depresión del 29... fueron todos elementos que fueron construyendo un clima hostil.
El clima hostil nace y crece desde el 19 no desde el 33, el tratado de Versalles y "la puñalada por la espalda" crean el resentimiento de la clase militar y oligárquica alemana, el crack del 29 no afectó mucho a Alemania directamente, ya que vivía un tímido proceso de recuperación, sin embargo, el dinero procedente de USA desapareció y eso conllevó una inflacción galopante, sólo basta mirar los billetes de un millón de marcos puestos en circulación, la lucha por el poder entre la burguesía y su brazo fuerte, partidos de derechas militarizados y por otra parte sindicatos y comunistas pusieron las bases para que naciera y prosperara un partido como el nacional socialista.
La victoria de Hitler sólo se comprende en ese contexto, aprovechándose de una coyuntura construída a base de deseperación.
No te lo pongo en duda, ni ahora ni en el anterior post.
Lo de que no engañó a nadie, no es tan meridiano. Vale que las bases antisemitas (ojo, sólo las bases; no ponía en ningún lado que construiría crematorios gratuítos) estaban ya programadas, así como la idea mítico-imperialista.
¿Mítico-imperialista?, supongo que te refieres al lebensraum, territorio vital para crecer como nación, la idea era ser autosuficiente a nivel económico mediante grandes extensiones cultivadas, bien comunicadas y trabajadas por mano de obra esclava.
Pero en ningún lado anunció que destruiría la República de Weimar desde dentro. Que establecería Tribunales Populares con las competencias totalitarias que él mismo les otorgó. Que disolvería los sindicatos y proscribiría los partidos políticos. Que aprovechando la muerte de Hindenburg, unificaría los cargos de Canciller y Presidente en su persona y emplearía ese poder supremo (contrario la Constitución de Weimar) como finalmente lo hizo.
Lo que prometió fue pan y circo, y lo hizo, inversiones estatales para frenar el desempleo, reactivación de la industria pesada y ligera, fomentar la natalidad, frenar la inflacción galopante, crecimiento de las infrastructuras y estabilidad económica y social, el camino para ello fue crear un estado policial, pero cuando la barriga la tienes llena nadie se pregunta donde van los chicos de la estrella dorada.
Engañar es también aprovecharse de la desesperación, debilidad, ignorancia ajena para beneficio propio. Él anunció la jugada, pero no puso todas las cartas sobre la mesa.
¿Qué no puso las cartas sobre la mesa?, "Mi lucha", autor Adolf Hitler
Yo lo llamo el milagro alemán, hablando con amigos y amigas de esas latitudes me comentan que el fenómeno nostálgico sobre el período dorado económico nazi todavía se recuerda y se añora, quizás por el momento de crisis del motor de europa, ¿preocupante?, realista, dame pan y llamame tonto.Tú no llamas engañar a eso, yo sí.