Tras chuparme unos cuantos programas de Sé lo que hicisteis, he descubierto que amo locamente a Dani Mateo. Lo cual, para qué engañarme; no resulta nada sorprendente puesto que la belleza tan enclichetada, de catálogo de calzoncillos y similares, me estimula y todo eso, pero, oye, donde se ponga un tipo de esos normalitos, como que más accesibles, casi callejeros y la seguridad que inspiran en plan "qué coño va a hacer este paria sin mí" o, cuanto menos, ternura "míralo, si es hasta guapo", que se quiten los Apolos del coño.
Así que, para el resto de putones a los que les suene la campanilla con los fulanos de este palo, sus dejo esta
página que está haciendo mis delicias.

Un hombre asín te puede hacer feliz.

Este, sin embargo, sólo te rellenará como un perrito caliente.