POR ERENA CALVO. LAS PALMAS.
Nunca habían visitado tanto el bar de la zona como estos días. Cafés, bocadillos, una botellita de agua, otro café, un bollo, un pincho de tortilla, unas aceitunas y vuelta a empezar. Y todo para poder entrar en su cuarto de baño sin que el camarero de turno mire de soslayo con cara de pocos amigos. Cuando la necesidad se presenta, pies en polvorosa para el local, «porque allí tienen algo que no tenemos nosotros aunque parezca mentira: papel higiénico».
Desde hace más de quince días las reservas de este producto que tan bien queda siempre al lado de un retrete se han terminado en la Compañía de la Guardia Civil de Vecindario, que comprende varios Puestos del Instituto Armado en Gran Canaria: Vecindario, Arguineguín (donde todavía no habían terminado con todas las existencias, comentaba al otro lado del teléfono un agente) y Agüimes; cerca de 360 hombres de la Benemérita más los detenidos, explican a este periódico fuentes perjudicadas por esta situación de carestía «higiénica».
Más tiempo...
Puesto este tema en conocimiento de la Comandancia de la Guardia Civil en Las Palmas hace semanas, uno de los responsables del Instituto Armado en la provincia pedía tiempo a la Compañía: «Hasta que no exista numerario suficiente para el concepto presupuestario que nos ocupa, no podrá ser atendida su petición».
Y preveía «la adquisición de papel higiénico a finales del trimestre natural»; sin embargo, superado el pasado martes ese plazo, «aún no han repuesto en las Unidades de la Compañía el material solicitado», explican fuentes de estos puestos.
Pero, sin duda, el detalle que más asombro causó entre los agentes no fue que tuvieran que esperar unos días a que repusiesen el papel, sino que se les instase en un documento al que ha tenido acceso este periódico a «tomar medios alternativos que no requieran remuneración alguna». Así «que tendremos que solucionar todo esto con imaginación, no nos queda otra de momento».
Los guardias civiles se preguntan cuáles son esos medios: «¿Usamos agua, servilletas, papel de periódico?, el bar de al lado sigue siendo la mejor opción pero ¿a qué medios se refieren?», preguntan con ironía a cerca del dilema que se les plantea. Sin embargo, reconocen, «algunos de nosotros hemos traído al trabajo algún rollo de papel higiénico de casa, sobre todo para los detenidos, porque no podemos tenerlos aquí horas y horas y pedirles que aguanten y no vayan al baño».
Desde la Asociación Unificada de la Guardia Civil (Augc) señalaron ayer que «lo grave no es que se queden sin dotación presupuestaria para papel higiénico, sino que se trate el tema con esa vulgaridad y que los mandos de la Comandancia nos aconsejen que nos busquemos la vida para atender a los ciudadanos».
La versión de la Comandancia de la Guardia Civil en Las Palmas es que la periodicidad para reponer este tipo de material es trimestral. «Los rollos de papel higiénico y otros productos se distribuyen cada tres meses, y en muchas ocasiones tenemos este problema con Vecindario, que habitualmente termina las existencias antes de que se vayan a distribuir de nuevo». Les instan a racionarlo y se preguntan «qué hacen con los rollos para terminarlos tan pronto».
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