Circo Máximo de Santiago Posteguillo
Quizás comenzar una trilogía por el segundo volumen no es la mejor de las opciones pero bueno, sigo con muchos problemas para poder obtener literatura electrónica y leo lo que puedo y me tráen. En todo caso, es novela histórica y se trata de una trilogia acotada. El segundo volumen trata de las guerras Dacias del Emperador Trajano. Aunque te cuenta una parte de la historia de forma amena, y eso es bien, es un libro bastante malo. Una novela histórica en la que los personajes, tanto los reales como los ficticios, son o muy buenos o muy malos ya te debe hacer saltar tu sentido arácnido, si además la trama se basa en manejar diversas subhistorias entrelazadas y que el autor las haga avanzar a base de concluir cada capítulo con un cliffhanger casi siempre idiota en innecesario tus otros cinco sentidos también deben estar en total alerta y si por último ves que Posteguillo, en una novela histórica, hace acabar muy mal a todos los personajes malos (con mucho de sufrir y eso) y bien a todos los buenos ya te entra la risa floja. Uno y no más, Santo Tomás. Puede que mi juicio hubiese sido algo más indulgente si no tuviera como referencia de lo que debe ser una novela de romanos a la saga de Colleen McCullough que aborda los tiempos de Roma desde Mario hasta la consolidación de Augusto. Pero se siente, Posteguillo, te quedas con un cuatro pelado, la McCullough se te mea en la cara desde mil metros de altura.
Últimos testigos de Svetlana Alexievich
El tercero que me leo de la Svetlana, y el tercero que me parece una puta ovra de harte. Qué extraordinariamente extraordinaria es esta escritora recogiendo testimonios sobre un acontecimiento histórico y plásmandolos luego en un libro. Tiene un talento para esto excepcional. En este ¿ensayo?, (pregunta sincera ¿Dentro de que género englobarías los libros de Svetlana? ¿Ensayo? ¿Relato Periodistico? ¿Crónica histórica? ) recoge los recuerdos de ciudadanos de la antigua Unión Soviética que eran niños cuando Alemanía declaró la guerra a la URSS en el 1941. Creo que todos los testimonios son de personas que en ese 1941 tenían entre 2 y 13 años. Se repite mucho, pero en bien, el recuerdo sobre ese primer día de la Guerra y luego ya entra en relatos tanto sobre hechos puntuales(en algunos casos los que forman parte de la memoria de adulto que era muy niño cuando sucedieron los hechos que narra y que sólo conserva en su memoria retazos) como sobre el relato entero de la supervivencia de esa niño a la guerra. Los testimonos son todos brutales. Todos. Eres plenamente consciente de lo salvaje y despiadada que es una guerra. Y de lo salvajes y despiadados que fueron los alemanes en la URSS. Como en todos los libros que me he leído de la escritora los relatos aparecen sin preguntas, uno detrás de otro. Se encabezan con el nombre del testimonio, su edad cuando comenzó la guerra y su profesión actual y después el relato personal, sin preguntas (aunque seguro que las hubo) y sin un esquema uniforme (aunque seguro que ese esquema existe) entre uno y otro relato. Sí que a veces la autora agrupa relatos que tienen ciertas similitudes (niños que acabaron con los partisanos, niños que fueron a parar a orfanatos, niños muy muy pequeños cuando comenzó el conflicto,etc) pero esa agrupación es difusa. Sólo puedo puntuarlo con un 10 y agradeceros infinitamente el que me hayáis descubierto en el phoro a Alexievich, leerla se convierte en un acto fundamental.