Si lo entiendes, y además sabes que esa foto no es una foto guarra tomada con móvil chino, sino que ahí hay encuadre, una Canon buena y un profesional. O igual no, que no tengo ni idea, pero todo atufa.
Ese rímel corrido, esa carita redonda, esos ojitos húmedos, esa inclinación de la cabeza: Diosa (del márketing y diosa sensual), mujer kamikaze, chica del instituto, la más loca del psiquiátrico.