Si a mí todo eso que comentas me parece muy bien. Lo que me saca de quicio es la gente que está planeando hacer celebraciones con 4 núcleos familiares diferentes, juntarse 17 personas, diferentes 17 personas en cada casa ("¿Cómo van a controlar cuántos nos juntamos?") y que luego se quejarán de "qué lata es llevar mascarilla".Chino escribió: ↑18 Dic 2020 10:15La cuestión es que cada caso es un mundo, y es muy difícil legislar pensando en excepciones. En el caso de mi madre, vive sola y no tiene más hijos que yo, ni más nietos que mis hijas. Hay algo más de familia por ahí, pero nos vemos un par de veces al año como mucho.M. Corleone escribió: ↑18 Dic 2020 10:04Pero en muchos casos hay alternativas intermedias, ¿no? Quiero decir, que mi madre lleva casi un año sin ver a sus nietos locales en casa y sin mascarilla, pero en la calle y con mascarilla hemos quedado con ella docenas de veces. Lleva un año sin achuchar a los locales, sin besos, pero no sin verlos. A los nietos que viven a 7 horas en coche sí que lleva sin verlos un año.
Así que, en su caso, esto es o bien encerrarse en su casa y ver a las nietas por la ventana o en el parque a distancia durante un rato y luego encerrarse en su piso sola, o bien hacer vida más o menos normal asumiendo el riesgo, y estar con sus nietas lo máximo posible.
Y ella ha elegido esto segundo, siendo consciente de los riesgos. Pero también pensando en que lo mismo mañana le da un chungo al corazón, y tanta precaución solo ha servido para pasarse el último año de su vida totalmente sola y aislada.
No sé, entre organizar una navidad gitana con 300 personas dándose besos y abrazos, y tener pequeñas reuniones familiares con el máximo de precaución, hay un trecho... y está claro que, como decía alguien por ahí arriba, lo mejor para la pandemia es que nos encerremos todos en casa a cal y canto durante un par de años, y que nos metan la comida por debajo de la puerta. Pero es que lo que es lo mejor para la pandemia no siempre es lo mejor para la sociedad, o para la salud mental de la gente.
Lo que comentas de tu madre me parece una evaluación de riesgos, primero, y una toma de decisión consciente después. Como el traslado de Rutti a ver a su madre. Todo perfecto, nada que decir. Mi opción con mi madre es consensuada con ella, que tiene EPOC, sobrepeso, y otra serie de enfermedades que le hacen tener muchos boletos para mudarse al otro barrio si lo coge. Para que os hagáis una idea, mi madre anda 50 metros, y tiene que pararse a descansar.
El levantamiento de las medidas restrictivas de la hostelería en Vasconienland sí que me parece absurdo, sobre todo teniendo en cuenta cómo somos de gilipollas: una amiga que trabaja en el hospital de referencia de la zona me contó que el primer día en que se levantaron las restricciones, a pesar de que el toque de queda a las 20 horas, tuvieron tropecientos comas etílicos de "veteranos" (gente entre 40 y 55). A la gente le puede el ansia: unos meses sin bares, y coma etílico con 45 años.