Pablo Casado tenía dos opciones:
1-Irse de la mano del Aceituno, y conservar así su amistad y lealtad de por vida.
2-Traicionar al Aceituno ofreciendo su cabeza a cambio de quedarse, para acabar teniendo que irse igualmente.
Ha elegido la segunda, porque ni honor, ni lealtad, ni decencia tiene.
Como Levy, Almeida, etc. Ratas.