Es una pena no poder saber qué hace la otra persona mientras piensa en el próximo movimiento, si está haciendo la comida, tomando un café, escuchando rock, intentando que los párpados no se cierren, sonriendo porque se cree ganadora o moviendo sin mucha reflexión porque tiene la cabeza llena de pájaros.
Ariadna escribió:Es una pena no poder saber qué hace la otra persona mientras piensa en el próximo movimiento, si está haciendo la comida, tomando un café, escuchando rock, intentando que los párpados no se cierren, sonriendo porque se cree ganadora o moviendo sin mucha reflexión porque tiene la cabeza llena de pájaros.
En el caso de Nicotín, rascarse los cojones.
Creían que estaba loca solo porque le quiso desenterrar una vez.
Ariadna escribió:No hace falta que nos hables de tus fantasías con otros foreros, cariño.
Ariadna escribió:Es una pena no poder saber qué hace la otra persona mientras piensa en el próximo movimiento, si está haciendo la comida, tomando un café, escuchando rock, intentando que los párpados no se cierren, sonriendo porque se cree ganadora o moviendo sin mucha reflexión porque tiene la cabeza llena de pájaros.
BarBara escribió:En el caso de Nicotín, rascarse los cojones.
Claro.
Creían que estaba loca solo porque le quiso desenterrar una vez.
Seguro que ya lo han explicado, ahora hasta parece que el amor es algo sin misterio alguno, están quitando todos los alicientes para ser una persona curiosa a la par que fantasiosa. El poder explicarlo todo es un arma de doble filo, a veces da demasiada tranquilidad de la que se deriva una apatía insoportable.